Borona ya es más que un bistró

El restaurante Borona Bistró se inauguró en Cáceres el 11 de agosto de 2021, rozando el día de San Lorenzo (10 de agosto), patrón de los cocineros. Y el pasado martes 10 de septiembre, rondando el día de Extremadura, Rocío Rey y Víctor Corchado abrieron las puertas de su nuevo local en la calle General Ezponda, a menos de un minuto a pie de la Plaza Mayor.

Algo debe significar que dos fechas tan señaladas sirvan a la perfección para definir este proyecto que ofrece cocina extremeña revisada y que ahora se muda a un nuevo establecimiento más grande y con mayor capacidad, pasando de 16 a 27 comensales aproximadamente. Sigue siendo un restaurante gastronómico, pero ya es algo más que un pequeño bistró. Un paso natural y soñado desde hace bastante tiempo que acerca su concepto a la parte más turística de la ciudad.

El flamante Borona mantiene la estética del anterior: mismos colores, lámparas... «Todo cambiará para que nada cambie», anunciaba antes de la apertura su chef, Víctor Corchado.Y es que esa ha sido la filosofía de la reforma: construir un espacio reconocible donde seguir armonizando tradición, producto y elaboraciones sencillas ensalzadas a su máximo potencial a manos de Víctor y su sous chef Aziz Taik.

Cuenta también con una cocina vista en la que los dos cocineros se mueven dentro como si de una tele gigante se tratase. Además de más aire entre las mesas, el nuevo Borona Bistró tiene un espacio apartado con una mesa redonda apta para cuatro personas, que podría considerarse un reservado. Un detalle que llama la atención y que también resume la magia de este proyecto es una serie de cuadros originales llamada 'Crisálida'. Son de la artista Hisae Yanase y en ellos aparece una criatura mágica japonesa que solo las personas con una sensibilidad especial pueden ver...

También con sensibilidad especial trabaja la maître y sumiller Rocío Rey, que elabora maridajes personalizados en función de los gustos de cada cliente, ya que en cuanto a vinos, han dado un salto de cantidad sin abandonar la calidad. Para el nuevo establecimiento, han duplicado las cavas y han traído algunas etiquetas de precios más elevados, siendo un total de 140 referencias de las que disponen.

Borona Bistró apostó desde un principio por los menús degustación. Ahora han recuperado el llamado 'Baileja' (disponible solo de martes a jueves), que fue con el que arrancaron en 2021 y propone dos más: 'Jaramago' y 'Algarabía', el más alto de gama, lanzado tras ganar el Sol de la guía Repsol el pasado mes de marzo.

Víctor funciona con la temporalidad, por lo que va modificando platos en función de los productos que le van llegando, pero en octubre plantea un cambio total del menú. «La gente ha sido quien nos ha ido marcando el cauce que hemos seguido. Nosotros proponíamos cosas y ellos han ido eligiendo hasta ser lo que hoy somos», confiesa. Muchas de esas personas han ido a despedirse del antiguo local, clara señal de que han disfrutado en él. Ahora tienen más espacio para continuar haciéndolo en este recién renovado Borona Bistró. Puedes leer aquí la crítica que realizó Don Poleo tras su apertura.

• Temas
• Restaurantes
• Gastronomía