Vistas a la Plaza Mayor desde uno de los salones del restaurante 'Miga'. ARMANDO MÉNDEZ

Miga

Los primeros segundos al entrar en un restaurante son muy importantes, pues nos envolverá una sensación que será difícil cambiar. En 'Miga' han decidido poner su mejor carta sobre una mesa situada en el hall de entrada. Se trata del libro con la historia y 70 recetas (una por cada año que vivió) de uno de los más grandes cocineros que ha albergado la región: Eustaquio Blanco. Y es que son sus cuatro hijas las que están al frente de este nuevo proyecto, abierto hace tan solo un par de semanas en pleno Arco de la Estrella, uno de los puntos más icónicos de Cáceres.

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'Miga' se asienta sobre una casa antigua, por lo que sus comedores son muy acogedores y recogidos. ARMANDO MÉNDEZ

«Teníamos ganas de montar algo en el casco histórico, por lo que hemos comprado y reformado esta casa, que pertenecía a la familia Escribano», cuenta Laura, la menor de las hermanas Blanco. Yolanda, Trini, Nerea y ella viven en diferentes puntos de la región, pero han aunado fuerzas, siguiendo el ejemplo de su padre de «todas a una» para continuar con el legado del maestro. De hecho, debajo de 'Miga' se aprecia el nombre de este cocinero que llevó las recetas extremeñas por todo el panorama nacional y que tan importante fue en la historia de 'El Figón de Eustaquio' (fundado por sus padres en 1947), además de la calidad que aportó a la ciudad años después, en 2007, con la apertura de su restaurante 'Eustaquio Blanco' en la avenida Ruta de la Plata.

Su recuerdo está presente en muchísimos detalles. Las migas, que por supuesto están en carta, son como él las hacía, con torreznos y huevo campero. El resto de platos hacen referencia a la tradición, algo que Eustaquio siempre defendió. Tienen sopa de tomate, sopa de ajo, carnes extremeñas elaboradas al horno Josper: cordero, retinta, ibérico... Aunque todo con un punto de actualidad y emplatados bonitos. Tienen gyozas, sí, pero de pringá y con un caldo espeso de puchero con hierbabuena en referencia a la gastronomía árabe.

Migas tradicionales, lomo de bacalao con pimientos al carbón y gyoza de pringá. ARMANDO MÉNDEZ

«En nuestra carta hacemos un guiño a las tres culturas que habitaron Cáceres», explica Iván Hernández, creador de la misma y jefe de cocina. «Nosotros practicamos la cocina del porqué. Todos nuestros platos tienen un sentido, un significado», explica este cocinero que ha pasado por Atrio y por los restaurantes de Chicote, entre otros. De hecho, el menú degustación se llama 'Las Niñas' porque Eustaquio se refería así a sus cuatro hijas.

Ensaladilla ibérica de patatas asadas al carbón, piparras y crujiente de tapioca con pimentón de la Vera. ARMANDO MÉNDEZ

El otro puntal de 'Miga' es Isabel Muñoz, la gerente. «Todo lo que sé de hostelería lo aprendí de Eustaquio Blanco. Es una persona muy querida y no hay día en que no me acuerde de él», confiesa con un cariño y una delicadeza que transmite en todo lo que hace.

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Además de la carta coherente y de temporada que propone este establecimiento, cuentan con una cava de vinos ubicada justo donde se encontraba la chimenea de la casa. Dentro alberga vinos curiosos y diferentes, como un Mencía de Verónica Ortega. «Son los vinos que nos gustan a nosotros y que queremos dar a conocer a nuestros clientes», indica Isabel.

Cava de vinos. ARMANDO MÉNDEZ

El local cuenta con varios salones en su interior, de aspecto acogedor e íntimo (apenas se escucha el ruido exterior), en los que caben unas 40 personas. Y dos esplendorosas terrazas con 20 mesas, es decir, unos 80 comensales. Todo ello con vistas a la plaza Mayor, por lo que 'Miga' está en la foto más repetida de Cáceres.

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Miga

  • Dirección Arco de la Estrella, s/n

  • Localidad Cáceres

  • Teléfono 927090402

  • Horario De miércoles a domingo de 13.30 a 16.30 horas y de 20.30 a 00.00 horas

  • Terraza

«En el poco tiempo que llevamos ya hay clientes que han repetido y eso es lo que cuenta. Nos vamos a casa con los pies reventados, pero contentos», asegura Isabel, quien explica que «Miga es un lugar para todas las personas, porque también puede venir una parejita joven con un presupuesto más bajo. Nosotros lo que queremos es estar en la memoria gustativa de la gente. Que prueben algo y se les quede grabado». En eso ya tienen experiencia, puesto quien sí ya es y será recordado siempre es Eustaquio Blanco y su cocina.

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