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Dulce y Chocolate
Sábado, 12 de abril 2025, 18:43
Los obispos son como se llaman en mi pueblo a los repápalos dulces. Su origen, como la mayoría de los postres típicos de los pueblos, es aprovechar restos de comida como el pan duro. Pero en mi casa, la tradición es elaborarlos con bizcocho y almendras creando este postre tan delicioso y único. ¿Te unes a la tradición?
Tiempo de preparación
10 minutos
Tiempo de cocción
10 minutos
Tiempo total
20 minutos
Comensales
4
Categorías
Postres
4 huevos
1 vaso y medio de bizcocho desmigado
1 cucharada de levadura
100 g azúcar
1 litro o litro y medio de leche (al gusto)
Almendras crudas picadas
Piel naranja y limón
Canela en rama
Aceite para freír (girasol u oliva suave)
Infusionar la leche con la mitad del azúcar, la piel de la naranja y del limón y con la canela. Calentar y cuando va a empezar a cocer se apaga y se deja tapada.
Batimos los huevos, añadimos el bizcocho desmenuzado, la levadura, el resto del azúcar y las almendras picadas. Mezclamos bien, hasta que quede una masa compacta pero no excesivamente dura.
Mientras tanto calienta el aceite, coges cucharadas de la mezcla y fries en el aceite. Dejas escurrir un momento en un plato y después los echas en la leche calentita.
De esta forma se esponjan con la leche y se mezclan los sabores. Suele servir frío.
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