Acorex se quedará con apenas veinte empleados tras otro ERE con 64 salidas

Con una caída en picado de la actividad y las peores perspectivas posibles a corto plazo, los trabajadores de Acorex y la dirección del grupo cooperativo acuerdan un segundo ERE en dos meses y medio. A partir del 12 de septiembre empezarán a salir de la empresa agroalimentaria 64 empleados, que se suman a los 82 que contempla el primer ERE. De esta forma, en un suspiro de tiempo, Acorex habrá adelgazado su plantilla de forma extrema, con 146 salidas (más las que se han producido sin acogerse al ERE de forma voluntaria), cuando su plantilla a comienzos de año se cifraba en 193 trabajadores.

La drástica reducción de personal se ha acelerado tras la llegada al grupo del navarro Francisco Javier López de Goicoechea, nuevo director general desde finales de junio. Tras mantener un encuentro con representantes de los trabajadores, se aceleró lo que venía siendo una hipótesis nada más aprobarse el primer ERE: que hubiera un segundo. Ayer, por unanimidad en asamblea, la plantilla del grupo Acorex aprobó que se produzcan más salidas pactadas.

«Los trabajadores han conocido cómo está Acorex y lo que puede llegar y han decidido aceptar un nuevo expediente para mantener las condiciones anteriores y no esperar a que haya un concurso de acreedores», confirmó ayer a HOY Francisco Rodríguez, responsable del sector agroalimentario de CC OO.

La propuesta acordada entre la dirección del grupo agroalimentario y el comité de empresa y los sindicatos incluye, como indemnizaciones, 27 días de sueldo por año trabajado con un límite de 16 mensualidades. El primer pago, un 25% de la cantidad final, se producirá a la entrega de la carta de despido. Es la misma que en el primer ERE.

El resto deberá ser abonado por Acorex en un plazo no superior a los seis meses. También antes de final de año el grupo se compromete a pagar un 3,5% del dinero que adeuda todavía de la reducción salarial efectuada en 2012 y que la empresa dijo que recuperaría más tarde.

Otras empresas

Las 64 nuevas salidas que ahora se producirán en poco menos de un mes se corresponde con 55 de Acorex SCL, la empresa matriz y la principal del grupo, y los 9 de la comercializadora CEPA, que solo se queda con un trabajador de los diez con los que contaba hasta ahora. En el caso de Acorex SCL, el tijeretazo laboral es aún más llamativo: de 60 empleados pasa a solo 5.

Además, el grupo sigue manteniendo, de sus empresas, a 4 empleados de Ibergenética, a 5 de Gesagri, a 9 de Extremeña Abonos Líquidos y a 7 de Acosierra, en preconcurso pero con incipiente actividad.

HOY ha intentado contactar con la dirección del grupo para valorar el segundo ERE e informar sobre la situación del grupo, pero no ha sido posible. Tampoco ha obtenido respuesta a los contactos abiertos oficialmente con los acreedores con el objetivo de ver rebajada su deuda y, de esta forma, tener visos de supervivencia.

Hay que recordar que los socios de Acorex aprobaron el 16 de julio una medida drástica como tabla de salvación: solicitar una quita de la deuda que tiene contraída con bancos y otros acreedores. El principal es una empresa pública, Avante, que le ha prestado 16,4 millones. A los bancos se les adeuda una cantidad parecida y a los propios cooperativistas de Acorex, unos diez millones.

Acorex SCL, de otra parte, entró en preconcurso de acreedores el 4 de junio. Según la ley, tiene hasta el 4 de octubre para intentar pactar con acreedores (Avante, bancos, diversos proveedores y hasta las propias cooperativas) el pago de la deuda contraída. Con el preconcurso activado, el grupo se aseguraba al menos que ningún acreedor solicitara el concurso necesario, que dejaría con menos capacidad de gestión a Acorex y una situación judicial más complicada para sus intereses.

Apenas se ha avanzado en ese posible acuerdo en el preconcurso. Si no lo hay sobre la deuda, se va directamente hacia el concurso y, con casi toda certeza, hacia la liquidación. En este inicio de verano se ha hablado más del protagonismo del grupo navarro AN, alcanzado acuerdos con las cooperativas que todavía integran Acorex, que de la propia viabilidad de la empresa extremeña.