M.F.R.
Martes, 26 de julio 2016, 08:04
IU de Cristina, con el concejal Pedro Frutos a la cabeza, fue el primero en dar la voz de alarma sobre el proceso de selección por sorteo para dos empleos públicos en el Ayuntamiento de Cristina donde se pedía expresamente que las mujeres no se presentasen por la naturaleza de los trabajos a realizar, que no eran otros que tareas de limpieza y adecentamiento del pueblo de cara a sus fiestas patronales.
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El sorteo se realizó y el trabajo fue adjudicado a dos vecinos del municipio. Pero cuando la noticia saltó a los medios de comunicación, el alcalde se vio obligado a dar marcha atrás, despidió a los dos trabajadores y anuló la convocatoria de empleo. Fue el Sexpe quien, a petición del alcalde, hizo la selección de candidatos para los dos puestos, que finalmente fueron adjudicados a una mujer y un hombre, ambos vecinos de Cristina.
Esta polémica ha enturbiado la relación vecinal en este municipio de menos de 600 habitantes, donde la vida política ha venido a enrarecer el ambiente. Tras doce años como alcalde -dos legislaturas gobernando en minoría y una con mayoría absoluta-, Pedro Frutos volvió a ganar las pasadas elecciones municipales de mayo de 2015 pero un acuerdo entre los concejales del PSOE y los del PP, vinculados por lazos familiares, le mandó a la oposición.
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