Unos 800.000 viajeros usan el ferrocarril en la región

La estadística oficial de Renfe indica que unas 800.000 personas hacen uso del tren en Extremadura cada año. Ese dato es el más reciente, el de los últimos tres años, en los que, salvo un incremento importante de pasajeros en 2015, ha mostrado una clara línea de continuidad en cuanto a los que deciden apostar por el ferrocarril para moverse desde la región con destino a otros puntos de Extremadura o fuera de la comunidad, Madrid y Sevilla fundamentalmente. En el año 2005, la región no alcanzaba el medio millón de usuarios. Desde entonces ha ido creciendo cada año, en mayor o menor medida, salvo en el año pasado.

Según ha informado Renfe a este diario, la entidad ferroviaria tiene en servicio más de 500 trenes cada mes en Extremadura. Son todos regionales o de media distancia del tren convencional.

La estadística señala que en 2013 el número de viajeros en tren de Extremadura ascendió a 795.000 personas. Un año más tarde, en 2014, los clientes de Renfe aumentaron levemente, aunque crecieron. Pasaron a ser 797.000.

El entonces consejero de Fomento del PP, Víctor del Moral, atribuyó el incremento al llamado plan de optimización del ferrocarril firmado entre el Gobierno extremeño y Renfe, «que ha supuesto además mejoras y la modernización de maquinaria e infraestructura». En 2013 se firmó un nuevo convenio entre la Junta y Renfe por el que la Junta aportaba cuatro millones al año para el mantenimiento de trenes regionales. Ese convenio estará al menos vigente hasta final de este año.

La subida más importante de viajeros se produjo en 2015. Tras finalizar ese año, el número de pasajeros ferroviarios se situó en 842.000 personas.

El año pasado llegó el descenso. Volvió a la tónica_habitual en las últimas fechas: fueron 799.000.

La estadística más reciente, en los primeros seis meses del año, apunta a que previsiblemente a final de año se volvería a alcanzar ese dato de cerca de 800.000 viajeros. Eran 384.000 pasajeros de enero a junio. En los meses de verano y entre septiembre y principios de octubre, con la Feria de Zafra, se produce un movimiento siempre apreciable de pasajeros de tren.