Un cerezo en flor pasado por agua

«Nosotros somos autónomos y tenemos seis empleados contratados para estas fechas, pero dos no me van a hacer falta, porque la lluvia nos va a dejar sin apenas negocio estos días», informa Lorenzo mientras Milagros, su mujer, termina de limpiar los baños del local. «Y estaré pendiente de la previsión del tiempo, porque igual tengo que seguir recortando la plantilla», cuenta el hostelero, cuyo gran reclamo, además de la carta, es la terraza.

No invitaba el día a sentarse en ella ayer pasadas las doce. Junto a las mesas y sillas mojadas había un desfile continuo de turistas abrigados y con el paraguas en la mano. Parejas, grupos de amigos, familias con y sin niños... «Los dos últimos fines de semana han sido muy buenos, ha venido mucha gente», cuenta Lorenzo, en una apreciación que seguramente firmarían algunos colegas suyos de Plasencia, cuya zona de cañeo y copeo en el centro histórico se llenó de público el pasado fin de semana.

A las siete de la tarde del sábado, costaba encontrar una mesa libre en alguna terraza de la Plaza Mayor o la cercana de san Esteban. Y esa excelente entrada se explicaba por dos motivos principales: el primero, el sol y el calor que invitaban a quitarse la chaqueta para estar en camisa o camiseta, y en segundo término, el cerezo en flor, que atrae al Valle del Jerte y a la cuarta ciudad de la región a miles de visitantes.

«Hemos venido de Málaga, dormimos ayer (por el domingo) en Cáceres y hoy (por el lunes) en el hotel del complejo de Valdecañas, porque tenemos un familiar que vive en la zona de Navalmoral de la Mata», informa uno de los componentes de un grupo que busca cerezos en flor en Navaconcejo.

«La lluvia influye sobre todo para las fotos», bromea el turista. «Hombre, con la sequía que ha habido, y la calima que estaba viniendo, también se agradece que llueva», aprecia otro de la pandilla, el mismo que explica que uno de los atractivos del viaje es el cordero asado que se van a comer. Y ese homenaje se lo van a dar aunque caigan chuzos de punta.

Lo de ayer fue principalmente una lluvia fina. Pertinaz, que dice el clásico. Y va a haber más mañanas así esta semana en el Valle del Jerte. Queda claro al hacer una consulta en la aplicación para móviles de la Agencia Estatal de Meteorología. Se pide el pronóstico para Cabezuela del Valle y la respuesta es descorazonadora: 90% de probabilidad de lluvia y 8,6 litros por metro cuadrado para este martes, 100% y 38,3 respectivamente para el miércoles, 100% y 46,4 para el Jueves Santo, 100% y 31 litros para el Viernes Santo, 100% y 7 para el sábado y 100% y 28 el domingo. El panorama apenas cambia al pedir el avance para Navaconcejo y para Plasencia.

Y luego están las temperaturas, que van a bajar claramente. En Piornal, el pueblo más alto de Extremadura, tendrán este martes dos bajo cero de mínima y tres de máxima, y en toda la semana superarán los ocho de máxima. En las cotas bajas y medias del Valle, que además es donde están ahora los cerezos florecidos, las temperaturas mínimas se moverán entre los 5 y los 8 grados, y las máximas en torno a los diez.

Es lo que hay para el cerezo en flor de este año. Y para la Semana Santa extremeña y española, en términos generales. Lluvia y frío. Un regreso al invierno nada más empezar la primavera. «Es una faena –resume Lorenzo– nos fastidia la mejor semana del año».