«He donado una veintena de biberones; sabía que era beneficioso para otros bebés»

Tamara Pizarro Moreno dio a luz a su hija hace seis meses. Acaba de tener una niña a la que le está dando el pecho y, además, cuenta con suficiente producción de leche que le permite donar al Banco de Leche Materna de Extremadura.

Así lo ha estado haciendo desde que nació durante cinco meses y medio para ayudar a aquellos bebés que son prematuros o nacen con bajo peso y sus madres no pueden amamantar.

«Es la primera vez que dono, aunque ya me planteé hacerlo cuando nació mi primer hijo, que tiene ahora cuatro años», comenta Tamara, que es enfermera y trabaja en la planta de Materno-Infantil del Hospital Campo Arañuelo.

«En este tiempo he donado una veintena de biberones. Sabía que era muy beneficioso para otros bebés. Tiene muchísimas ventajas para los pequeños y también para una misma. Así que todo eso me hizo pensar y al final no dudé en hacerlo. Simplemente hay que organizarse un poco», cuenta Tamara cuando justo se celebra la Semana de la Lactancia Materna. Del 1 al 7 de agosto se ponen de manifiesto sus beneficios.

Este año la Organización Mundial de la Salud ha elegido el lema 'Amamantar y trabajar. ¡Hagamos que sea posible', para que se implementen medidas de apoyo a las mujeres lactantes a la hora de volver a su puesto de trabajo; algo que los expertos consideran posible si se establece un «buen plan de lactancia».

Por su parte, en esta semana, la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) también ha asegurado que «la leche materna es el mejor comienzo en la vida de los bebés, pues es un alimento perfecto y completo y que está demostrado que ayuda a prevenir muchas enfermedades tanto en la madre como en el bebé». Detallan que «se denomina fluido vivo, que se va adaptando a las necesidades según la etapa del crecimiento».

Asimismo, han llamado a «no censurar» a las madres que deciden no dar el pecho a sus bebés, y a «respetar, empatizar y normalizarlo, sin crear estigmas».

Recuerdan que se trata de una de las primeras decisiones que tienen que tomar cuando dan a luz, si bien la falta de información sobre este y otros asuntos relacionados con lactancia resulta ser una barrera para ello. «En cualquier caso, la elección que tomen ha de ser respetada», insisten.

Por ello, pediatras, enfermeras de pediatría y matronas colaboran en el apoyo a las madres que quieren lactar a sus hijos y tratan de evitar sentimientos de fracaso en las que no lo consiguen o no lo desean en los primeros días del posparto.

En palabras de la vicepresidenta de AEPap, la doctora Teresa Cenarro, «no hay duda de que lo mejor es la lactancia materna, pero, para aquellas que no quieren, no pueden o les supone un trauma, existen otra opciones».

Además, para la pediatra, la lactancia materna «no es algo fácil ni sencillo» porque requiere de un gran esfuerzo. «Por sus beneficios merece la pena probar, pero sin morir en el intento», añade.

En los casos en que las madres deciden no amamantar, AEPap recuerda que los profesionales deben asegurar que el bebé se está alimentando de manera correcta y segura con sucedáneos de leche materna.

• Temas
• OMS
• Extremadura
• Leche
• Maternidad