Ecologistas en Acción considera que es una victoria del medio ambiente

«Desde el primer momento dijimos que esto podía acabar con la demolición de todo el complejo», apunta Ángel García Calle, coordinador de Ecologistas en Acción en Extremadura, sobre la decisión del Tribunal Supremo acerca de Isla Valdecañas.

El auto del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) salvaba del derribo el hotel, las viviendas, el campo de golf y las instalaciones que estuvieran construidas y en funcionamiento. Ahora, al estimar el Supremo el recurso de casación interpuesto por Ecologistas en Acción contra el mencionado auto, también deberán ser demolidos. «Es una victoria del medio ambiente y de la legalidad», comenta García Calle.

También es un triunfo para Ecologistas en Acción, que fue la única organización que mantuvo viva la batalla judicial tras el auto sobre la demolición parcial. «Es una defensa de un territorio protegido, en el que se decide urbanizar sabiendo que no se podía urbanizar», insiste García Calle, que considera que se trata de una situación desagradable para todos los implicados. «Yo entiendo a los propietarios, pero muchos compraron sabiendo que allí no se podía construir», remarca.

Ante la decisión del Supremo no cabe recurso ordinario pero sí recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional. «Entendemos que tendrá muy poco recorrido, pero que los propietarios tratarán de gastar la última bala», concluye el coordinador de Ecologistas en Acción.

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