![La niebla también aisla a Extremadura](https://s1.ppllstatics.com/hoy/www/multimedia/201901/12/media/cortadas/133312801-kWq-U702207841323RF-984x608@Hoy.jpg)
![La niebla también aisla a Extremadura](https://s1.ppllstatics.com/hoy/www/multimedia/201901/12/media/cortadas/133312801-kWq-U702207841323RF-984x608@Hoy.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
El 27 de diciembre la niebla impidió que aterrizara en Badajoz el elenco de Los Chicos del Coro, espectáculo que tuvo que ser aplazado en el teatro López de Ayala. Fueron solo una mínima parte de los viajeros damnificados por este fenómeno meteorológico que también frustró varios vuelos durante el puente de Reyes, cuando se multiplican los desplazamientos. Entre una fecha y otra ha habido cientos de personas más que estas Navidades no han podido aterrizar ni despegar de Badajoz por culpa de la niebla.
Las compañías suelen poner medios de transporte terrestre y uno de los afectados que salió de Badajoz en autobús hacia Madrid explicó en HOY que él sí llegó a tiempo para coger su siguiente vuelo a Tenerife «pero hubo muchos viajeros que perdieron los enlaces, entre ellos una familia que iba a Sudáfrica. Ha sido un caos completo», señalaba.
Cuando parecía que las incidencias ferroviarias eran todos los males que padecía Extremadura en materia de comunicaciones, la aparición de estas nubes a ras de pista varios días consecutivos de diciembre y enero ha obligado a suspender o redirigir ya 36 vuelos en lo que va de invierno. La causa es que la pista de aterrizaje del único aeropuerto de la región no es lo suficientemente visible desde el aire con estas condiciones, una cuestión técnica que tiene que ver con sistemas y protocolos de aterrizaje. Sobre este asunto los extremeños hemos empezado a hablar con soltura e indignación desde que hemos sabido que otras instalaciones similares de España y Europa disponen de sistemas más avanzados para que el piloto pueda aterrizar con seguridad.
Sin embargo, primero hay que saber que la niebla de las últimas semanas no ha sido normal. Los meteorólogos apuntan a que este fenómeno meteorológico, sin ser excepcional porque la proximidad de la pista al río Guadiana favorece la permanencia de bancos de niebla, está siendo mucho más frecuente que otros años. En esta apreciación coinciden desde Aena, la empresa pública española que gestiona los aeropuertos de interés general en España y que respondió a este diario que «la meteorología en diciembre en el Aeropuerto de Badajoz ha sido muy atípica, presentándose fenómenos de niebla con una intensidad y periodicidad muy superior a lo habitual, así como una duración mayor a lo largo del día».
Según sus datos, de los 128 vuelos programados en diciembre, la niebla obligó a cancelar 30 y a desviar dos, mientras que en lo que va de enero ha habido dos cancelaciones y dos desvíos al aeropuerto alternativo de Sevilla. A estas incidencias hay que añadir las demoras en varios vuelos más.
Air Nostrum, la única compañía que opera en el aeropuerto pacense, habla de que algunos de estos vuelos tenían una previsión de 4 pasajeros, si bien reconoce que en otros superaban las 50 reservas.
Cuando las cancelaciones empezaron a ser continuadas varios partidos políticos como Podemos o Badajoz Adelante se apresuraron a pedir explicaciones de por qué el único aeropuerto de Extremadura es tan vulnerable a la niebla.
Incluso la Junta de Extremadura el pasado día 8 anunció que había trasladado al Ministerio de Fomento la necesidad de que el aeropuerto de Badajoz cuente con medidas o dispositivos que eviten las cancelaciones y retrasos de vuelos motivados por la niebla.
Por otro lado, en redes sociales los ciudadanos llevan varias semanas preguntándose con indignación por qué no se invierte en esta instalación para que los viajeros con destino a la región no tengan que sufrir demoras ni trastornos en sus vuelos. Pero según Aena, «ni siquiera con los instrumentos de ayuda a la navegación más precisos podrían haberse evitado estas incidencias».
Air Nostrum, la compañía aérea filial de Iberia que opera en el Aeropuerto de Badajoz, señala que estas cancelaciones se han dado en toda España y que el Aeropuerto de Badajoz tiene prácticamente la misma dotación de señales que las que tienen en la mayoría del resto del país en cuanto a Sistema de Aterrizaje Instrumental (ILS, Instrumental, Landing System). Esto tiene que ver con que, en general, los aviones comerciales deben volar entre nubes y de noche y por eso se guían por instrumentos. Esto es, al piloto no le hace falta ver lo que hay en el exterior. Sin embargo, de entre los muchos fenómenos meteorológicos, desde la lluvia, el viento o la nieve hasta el hielo que se pueda formar en la pista, la niebla es el peor enemigo, «el único prácticamente inevitable», resume Carlos Luna, piloto comercial que imparte clases en la escuela Aerofan del aeródromo de Cuatro Vientos (Madrid).
Por otro lado, hay que apuntar que los vuelos desde Madrid aterrizan en Badajoz entre las 8 y las diez y media de la mañana (también hay vuelo por la tarde), un periodo del día en el que es más frecuente que se acumulen bancos de niebla.
Según explican desde Air Nostrum los aeropuertos se clasifican en función de la mayor o menor complejidad de los sistemas de ayuda de aproximación de los vuelos, los cuales adquieren una mayor relevancia en condiciones de baja visibilidad. Así, hay aeropuertos con ILS de categoría 3, que en España solo la ostentan los de Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca. En este caso, el piloto puede aproximarse más a la pista de aterrizaje incluso cuando no tiene visibilidad gracias a los sistemas de iluminación.
El siguiente escalón son los aeropuertos con ILS de categoría 2, como el de La Coruña o Valladolid. En el tercer grupo, los de ILS con categoría 1, están la mayor parte de aeropuertos del país: Además del de Badajoz, en este grupo figuran La Rioja, León, Burgos, Salamanca, San Sebastián, Pamplona o Santander e incluso otros con más tráfico que todos los anteriores como Málaga, Bilbao o Valencia. Según explican desde Aena, con un ILS de categoría 1 se puede aterrizar con una visibilidad mínima vertical de 200 pies (61 metros) y alcance visual de 800 metros.
Además, existen en España otros medios más precarios para ayudar a la aproximación de aeronaves, por ejemplo la baliza no direccional que hay en el Aeropuerto de Melilla.
Sin embargo, esto es solo una parte de la explicación. Hay que saber que la aeronaves deben estar equipadas convenientemente para aterrizar en aeropuertos de según qué categoría, así como que las tripulaciones tengan la preparación necesaria para ello. En Extremadura Air Nostrum opera entre Badajoz, Madrid y Barcelona con el avión CRJ 1000, los cuales pueden operar en aeropuertos de categoría 2, igual que sus pilotos, habilitados para esta misma categoría. Por tanto, es una cuestión del aeropuerto, que tiene categoría 1, lo que impide el aterrizaje en condiciones de poca visibilidad propiciada por la niebla.
¿Quién categoriza los aeropuertos en función de su Sistema de Aterrizaje Instrumental? De ello se encarga una agencia especializada de las Naciones Unidas que es la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI)) en función del equipamiento declara la categoría de ILS del aeropuerto y de la aeronave. España está sujeta a estas reglas.
La cuestión, tal y como han demandado algunos usuarios en los últimos días, es saber por qué no se invierte en mejorar las pistas para que cada vez haya menos aeropuertos con ILS de categoría 1 y más con categoría 2 o 3, lo que reduciría la cifra de aterrizajes frustrados.
Según Aena, «los terrenos donde está ubicado el Aeropuerto son propiedad del Ministerio de Defensa, por lo que cualquier actuación que se haga en los mismos tiene que ser autorizada por ellos».
En este caso conviene recordar que en Badajoz se ampliaron y mejoraron las instalaciones en 2010 tras una inversión de Aena a través del Ministerio de Fomento de 7,7 millones de euros. En cuanto a la pista se actuó principalmente en su pavimentación.
Carlos Luna | Piloto comercial e instructor
Según el piloto Carlos Luna, «el Aeropuerto de Badajoz puede ser mejorado, pero al ser de uso compartido civil y militar esto complica cualquier inversión, ya que debe estar supeditada a un acuerdo entre dos ministerios, el de Fomento y el de Defensa». No obstante, este profesional de la aviación no ve claro que la solución sea invertir en sistemas de iluminación anti-niebla. «Todos los aeropuertos de nuestra geografía no deben orientar sus esfuerzos y recursos ahora en gastar una millonada en poner un sistema de ILS avanzado cuando en poco tiempo, todo se hará con sistemas de GPS de alta precisión», señala.
Hay que saber además que la aparición de la niebla también ha afectado a la base militar donde opera el Ala 23 el Ejército del Aire, cuya pista es compartida con la terminal civil del aeropuerto pacense. Durante varios días de este invierno ha sido imposible que volaran los aviones F-5 de la escuela de caza y ataque, lo que indica que ni los pilotos mejor entrenados se libran de las limitaciones que impone este fenómeno meteorológico en el aeropuerto pacense.
J. L. G.
Precisamente la Base Aérea de Badajoz/Talavera la Real es uno de los lugares que miden en la región datos climatológicos, lo que permite saber si en este punto la niebla es muy frecuente. La estadística que maneja la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) data de 1955 y revela que el de 2018 ha sido el mes de diciembre con mayor número de jornadas de niebla desde que hay registro, con un total de 20 días, siendo la media para los meses de diciembre de 8,1. El máximo contabilizado en todo un año fue de 21 días en el 2000. Por contra, el número mínimo es 0 que se registró en el 2017.
En cuanto al mes de enero, la media registrada por Aemet es de 8,4 días de niebla, y en le presente 2019 hasta el pasado día 9 ya se habían contabilizado siete días con niebla.
Hay que tener en cuenta, según explica Manuel Lara, meteorólogo y portavoz adjunto de la Delegación de Aemet en Extremadura, que la ubicación del aeropuerto de Badajoz próxima al río Guadiana aporta humedad al entorno y favorece la aparición de espesos bancos de niebla que se mantienen por más tiempo al estar en una zona baja porque el enfriamiento nocturno es mayor, sobre todo en los inviernos en los que no llueve como el actual.
Publicidad
Jon Garay y Gonzalo de las Heras
Equipo de Pantallas, Oskar Belategui, Borja Crespo, Rosa Palo, Iker Cortés | Madrid, Boquerini, Carlos G. Fernández, Mikel Labastida y Leticia Aróstegui
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.