Prepararse para el parto en soledad

Es una de las liturgias a las que se enfrentan las embarazadas en sus últimos meses de gestación. La educación maternal, conocida como preparación al parto, es el paso final antes de enfrentarse a ese trance de dar a luz. Una o varias matronas abordan en clases presenciales que suelen durar unas ocho semanas aspectos necesarios para que la madre vaya más segura y también para la crianza y los cuidados del bebé. Los padres también acuden a esta formación gratuita y no obligatoria que brinda la sanidad pública. Pero desde que estalló la amenaza del coronavirus todo ha cambiado y no es posible hacer esta formación en grupos de 10 o 12 parejas como es habitual.

La cacereña Rocío Mateo será madre por segunda vez dentro de cuatro semanas. Su periodo de gestación le ha pillado en mitad de esta enorme crisis sanitaria y ella se ha cuidado especialmente para no contraer el virus intentando aislarse al máximo. «En mi caso, al ser el segundo parto ya tengo cosas aprendidas, pero la educación maternal es muy necesaria sobre todo cuando eres madre primeriza», indica Mateo, que valora mucho la cohesión que se da entre las madres, que comparten sus dudas y sus miedos. «Van mujeres que ya han pasado por ello y que te dan consejos» Es una especie de terapia de grupo. Además de una importante parte práctica, también se practican ejercicios de relajación y de respiración. La lactancia es un asunto central y se le dedica tiempo.

En el caso de Rocío, además de no contar con este curso también ha visto sustituidas algunas revisiones por el seguimiento telefónico. «La matrona nos ha llamado, nos ha dado el resultado de los análisis y me iba preguntando cómo estaba». La ecografía que se hace a las 30 semanas de gestación le fue aplazada. «Ahora ya vuelven a hacerse», señala esta mujer. «Sí que se ha hecho la de la semana 20, porque es una revisión muy completa». Rocío ha tenido un cambio de matrona y ésta le ha pedido la dirección de correo electrónico para conectar con ella de forma telemática.

Ella forma parte del grupo de lactancia Amaryi de Cáceres, que reúne a mujeres y familias en torno al tema de la crianza. A través de las redes sociales han ido dando respuesta a las mujeres que han recurrido a ellas. «Nos han llegado algunas consultas y también nos hemos resuelto dudas entre nosotras».

Desde el SES se explica que se han sustituido las clases grupales con el formato individual a través de consultas presenciales y telefónicas. Indican que las matronas han entregado a las madres material «a veces diseñado por ellas mismas» y que han recomendado fuentes como libros, infografías, páginas web y vídeos tutoriales.

«La valoración de la experiencia refleja satisfacción general por parte de las usuarias, si bien, tanto profesionales como embarazadas coinciden en que de esta forma se pierde la experiencia, útil y enriquecedora, de compartir vivencias entre iguales», destaca el SES.

La previsión es poder retomar estos cursos pronto. Las recomendaciones de expertas en el tema, como la Asociación Profesional de Matronas Extremeñas, será posible reanudar la actividades grupales cuando entremos en la final de la desescalada, es decir, a partir del 22 de junio.