«Después de cuatro años sin salir, estamos locos por poder hacerlo»

Este Viernes Santo es muy especial para la Cofradía del Santísimo Crucifijo y el Descendimiento de la Cruz por dos motivos. El primero es que por fin, después de cuatro años sin poder hacerlo, va a poder salir en procesión. El segundo, porque podrá lucir uno de sus dos pasos titulares restaurado, el del Descendimiento.

«En 2018 y en 2019 no pudimos salir en procesión porque la lluvia nos lo impidió, y en 2020 y 2021 tampoco por la pandemia; así que después de cuatro años consecutivos sin poder salir, estamos locos por poder hacerlo», resume el presidente de la Cofradía del Santísimo Crucifijo y el Descendimiento de la Cruz, Jesús Manuel Miranda.

La procesión saldrá a las 21 horas desde Santo Domingo y realizará su recorrido habitual con los tres pasos con los que esta hermandad lleva haciéndolo desde 1925: el Cristo de la Agonía, el Descendimiento y la Virgen de las Angustias.

El primero es propiedad del Obispado y se venera durante todo el año en la parroquia del Pilar desde que se cerró al culto San Vicente Ferrer. A este templo, conocido también como Santo Domingo, regresa la talla del siglo XVI de autor anónimo cada Semana Santa el sábado previo al Domingo de Ramos, tras un vía crucis por el barrio del Pilar, adonde vuelve cuando termina la celebración religiosa.

Fue restaurado por el Obispado antes de 2018, pero los placentinos no han podido verlo desde entonces porque son cuatro los años en que lleva sin procesionar. Como tampoco han podido ver, hasta este Viernes Santo, el nuevo paso del Descendimiento, que el próximo 2025 cumplirá un siglo. «Por eso era necesaria su restauración, porque estaba ya muy deteriorado, así que la hemos llevamos a cabo durante la pandemia, puesto que sabíamos que no podíamos salir», explica Jesús Manuel Miranda.

Las encargadas de hacerlo han sido las hermanas Alba y Elsa Ramos en su taller de Talavera de la Reina. Y a ambos pasos titulares restaurados se sumará en la procesión de este Viernes Santo el de la Virgen de las Angustias, de José Jerique igual que el Descendimiento, «que ha quedado perfecto», adelanta el presidente de la cofradía.

El cortejo infantil y los estandartes de las siete palabras abrirán un desfile en el que la música correrá a cargo de la Agrupación Musical de la Sagrada Cena y la banda 'Ciudad de Plasencia', y en el que está previsto que participen alrededor de 600 cofrades en total.

Algunos menos, en torno a los 200, lo harán en la procesión del Sábado Santo, a cargo de la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad y el Santo Sepulcro. La que abrirá la cruz guía y que protagonizarán los dos pasos titulares que dan nombre a esta hermandad placentina.

El paso del Sepulcro, con un Cristo yacente del siglo XVI de autor desconocido, una figura de corcho policromado de una solo pieza de tamaño natural, en una urna de cristal del siglo XVII. Y la Virgen de la Soledad, de 1764 y obra de Luis Salvador Carmona, una talla de vestir a la que solo se le ven las manos y la cara, que lucirá un vestido blanco con un manto negro con bordados dorados y con la insignia de la Guardia Civil, «que fue quien nos cedió el manto hace 25 años cuando nos hermanamos con el cuerpo», detalla Julián Gutiérrez, presidente de la Cofradía de la Soledad y el Santo Sepulcro.

La música correrá a cargo de la Agrupación de la Sagrada Cena y, como manda la tradición, la sección de damas de la Soledad acompañará a la Virgen en una procesión que saldrá a las 19.30 hora desde Santo Domingo.

Pero esta hermandad tendrá por la mañana una novedad este año. «Alfonso Silos, el placentino que ha pintado un cuadro protagonizado por nuestra Virgen de la Soledad, nos hará entrega del mismo para que lo podamos exponer durante todo el año en el templo cofrade de San Vicente Ferrer», indica Gutiérrez, donde también durante todo el año se guardan los pasos de esta cofradía. En realidad, cinco, aunque solo procesionan sus dos titulares, «porque la Verónica se la hemos cedido a la Vera Cruz y para los otros dos pasos que tenemos, San Juan y San Pedro arrepentido, no contamos con costaleros suficientes para sacarlos», concluye el presidente.