¿Qué ha pasado hoy, 7 de abril, en Extremadura?
Un guardia civil junto a una construcción en el campo investigada en Torre de Santa María, en la comarca de Montánchez, a principios de año. HOY

El Seprona denuncia 355 infracciones en Extremadura por construcciones ilegales en dos años

Además ha detectado 24 delitos contra la ordenación del territorio y detenido a 39 personas en ese periodo

Domingo, 30 de marzo 2025, 20:28

El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) tuvo el año pasado mucho trabajo en la comarca cacereña de Montánchez. En el término municipal de Torre de Santa María (517 vecinos) detectó, tras doce meses de investigación ... , catorce «procesos edificatorios» ilegales en terreno rústico, sin permisos y sin la documentación necesaria para que se pudieran levantar.

Publicidad

Eran construcciones ilegales levantadas en el campo, bien de nueva planta o bien naves reformadas que solo pueden ser agrícolas pero fueron habilitadas como viviendas.

Solo en los dos últimos años, informa la Guardia Civil a HOY, la labor investigadora del Seprona ha posibilitado sacar a flote 355 infracciones en este terreno.

Más graves son las actuaciones consideradas como delitos por la Benemérita relacionadas por infringir la normativa de ordenación del territorio y urbanística. Se han detectado 24 entre 2023 y 2024. Por estos casos han sido detenido o investigados 39 personas entre las dos provincias extremeñas.

En el caso de Torre de Santa María, que saltó a la opinión pública en enero pasado, el Seprona ha tomado declaración como investigados a siete hombres y tres mujeres en un caso que ha pasado ahora al juzgado de Cáceres.

Publicidad

Un poco antes, el 20 de octubre pasado, HOY adelantó que una edil de Izquierda Unida en la localidad de Barcarrota (comarca de Olivenza, 3.473 habitantes censados), Dolores Asensio, construyó dos edificaciones y una piscina en una parcela que tiene la consideración de suelo no urbanizable siendo concejala de Obras dentro del gobierno local de coalición con el Partido Popular.

Una sentencia del juzgado de lo Penal número 2 de Badajoz recogía que Asensio inició la construcción de una vivienda unifamiliar aislada de 108,73 metros cuadrados de superficie y un porche de 35,60 metros cuadrados «en una fecha próxima a 2016» junto con una piscina.

Publicidad

También inició la construcción de una nave de aperos entre 2008-2011, para después ampliarla en 2013 y ponerle un porche en 2016 de 53 metros cuadrados. Ni ella ni su marido solicitaron la previa licencia «por tener perfecto conocimiento de que no se podía construir en el lugar».

Tampoco el matrimonio solicitó informe previo sectorial de carreteras para construir la nave dentro de la zona de afección de la carretera nacional 435.

El juzgado ha condenado a Asencio y a su marido a derribar lo construido al ser declaradas obras ilegales. Se les impone una pena de seis meses de prisión (si no cometen nuevos delitos y demuelen lo construido no pisarán la cárcel), inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante este tiempo y una multa de 4.500 euros.

Publicidad

La concejala se ha visto obligada de dejar su acta de edil. IU no ha cubierto aún su vacante en el Pleno de Barcarrota.

 

Tipología

Sobre el problema de las edificaciones ilegales explica la Guardia Civil que según el daño causado por la construcción «o perjuicio al medio ambiente» se puede catalogar como infracción administrativa o delito.

En el Código Penal se contemplan varios comportamientos que son clasificados como delitos relacionados con el urbanismo. El delito contra la ordenación del territorio y urbanismo fija penas de prisión de un año y seis meses a cuatro años.

Publicidad

Además incluye inhabilitación especial para la profesión u oficio por tiempo de uno a cuatro años a los promotores, constructores o técnicos directores que lleven a cabo obras de urbanización, construcción o edificación no autorizables.

Concienciar a los ciudadanos de la importancia de la ley

Las investigaciones por infracciones o delitos urbanísticos no solo tienen un fin. La actuación del Seprona demuestra «el compromiso de la Guardia Civil en la protección del medio ambiente y la ordenación sostenible del territorio». Su trabajo no solo busca sancionar conductas ilícitas, sino también concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de respetar la normativa urbanística y «evitar nuevos comportamientos que pongan en peligro el equilibrio territorial y social», remarca la Benemérita. Recuerda a HOY que el incumplimiento de las leyes urbanísticas no solo constituye un delito, sino que puede derivar en «graves consecuencias legales y un impacto negativo para el desarrollo ordenado de los municipios».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Primer mes sólo 1€

Publicidad