Se agradece a estas alturas que no llueva esta jornada en Extremadura. O que apenas lo vaya a hacer. Pero el riesgo de inundaciones, lejos de remitir, se mantiene. Y se va a incrementar a partir de mañana, cuando la borrasca Martinho va a dejar, otra vez, generosas precipitaciones en la región. La situación por la crecida de arroyos y ríos sigue siendo igualmente complicada porque más de 60 embalses, prácticamente todos los de la Junta de Extremadura, más 13 de la Confederación del Guadiana y del Tajo, están aliviando agua. En mayor o menor medida, pero se está soltando agua. Y eso anticipa unas horas, jornadas incluso, de mucha inquietud en las zonas de ribera y en las zonas más bajas de cascos urbanos próximas a ellas.
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La última presa en desembalsar es la de Tentudía, en el sur regional. Entre Calera de León y Monesterio. Su titular es la Confederación Hidrográfica del Guadiana. Hasta hace poco estaba en situación crítica, con menos de 0.79 hectómetros cúbicos retenidos. Esta noche ya ha alcanzó los 5 de tope y suelta agua. No liberaba caudal el embalse de Tentudía desde 2013.
Todo esa agua va finalmente por el río Bodión hasta el río Ardila y de ahí al embalse de Valuengo, en Jerez de los Caballeros, con 20 hectómetros cúbicos...que lleva aliviando días cantidades ingentes de agua. Es una presa de la Junta.
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La Administración extremeña es titular de medio centenar de presas, casi todas de pequeña capacidad. De no más de 2 hectómetros cúbicos. La de Valuengo es la de mayor tamaño, seguida de la de Nogales (15 hm3) y la de El Aguijón (11, Barcarrota). Todas igualmente alivian desde hace días. Y por eso todos los cauces de ríos y arroyos van crecidos.
Y más van los que se asientan sobre presas de las dos confederaciones hidrográficas que dominan casi todo el territorio regional. La del Guadiana contabiliza a esta hora ocho presas aliviando. Son las de Villar del Rey, con 135 hm3 embalsados sobre un tope de 131; Los Molinos (35,70 sobre un tope de 33,8); Cancho del Fresno (con 15,40 sobre un máximo de 15); Ruecas (con 42 sobre 39); Gargáligas (22 sobre 19); Cubilar (6 sobre 5); y Los Canchales (27,94 sobre 26). Como se percibe, en todas hay más agua que la máxima de capacidad porque entra mucho caudal.
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Según informa la CHG, Gargáligas está saliendo 30 m3/s, parte de este caudal se lleva a la presa de Orellana a través del canal de las Dehesas (9 m3/s) y el resto al río. Mientras la presa de Cubilar expulsan 8 m3/s de los cuales 6 m3/s se llevan a Sierra Brava a través del canal de las Dehesas y el resto al río. Por su parte el embalse de Los Molinos está aliviando 64 m³/s y la de Villar del Rey, menos, 20 m³/s.Por último, la presa de Los Canchales saca 5 m³/s y la de Cancho del Fresno, 7 m³/s, agua que va hacia la de Ruecas, también aliviando y de la que no se ofrece datos de caudal que sale.
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La subida de nivel y los desembalses en las presas del Guadiana, en imágenes
El sistema de interconexión de embalses de la Confederación del Guadiana hace que se pueda aprovechar. Uno de los casos más significativos en el de Los Molinos-Alange. Ambos sobre el río Matachel. El primero, en su cabecera; el segundo, aguas abajo. El embalse de Alange, del que bebe Mérida, estaba el 2 de marzo con 122,7 hectómetros cúbicos retenidos. Hoy tiene casi 246. Todo gracias, fundamentalmente, al inmenso caudal que está liberando Los Molinos desde hace semanas.
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En el caso de las presas de la Confederación del Tajo en la provincia cacereña, liberan caudal las de Rosarito, con 63,75 hm3 retenidos sobre un máximo de 82); Valdeobispo (con 48,78 sobre 53); Jerte (35,6 sobre 59); Borbollón (65,42 sobre 88) y Rivera de Gata (41,17 hm3 embalsados sobre un máximo de 49).
Aunque las dos confederaciones indican que los metros cúbicos por segundo que se sueltan han ido reduciéndose lo cierto es que se mantienen los desembalses. Y se va a incrementar con casi toda seguridad a partir de mañana con la borrasca Martinho.
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Para analizar la situación se ha convocado esta mañana por parte de la Junta de Extremadura, la administración competente en protección civil, el Cecop. Es el Centro de Coordinación Operativa. Presidido por el consejero de Presidencia e Interior, Abel Bautista, este ha iniciado la reunión haciendo una evaluación de las incidencias producidas desde la primera alerta dada por el paso de la borrasca Jana. Igualmente se ha hecho una evaluación de «las acciones emprendidas para paliar los daños ocasionados por la misma».
El Cecop debe ahora estar atento a las consecuencias de la borrasca Laurence, que nos acaba de dejar con muchas incidencias en el sur, este y sureste de la provincia pacense, y lo que se nos avecina con la llegada de la próxima perturbación, otra borrasca de gran impacto denominada Martinho.
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