El vecino de Acebo que murió el domingo en Moraleja recibió golpes en la cabeza

La Guardia Civil ha detenido a un hombre, residente en Moraleja, por su supuesta vinculación con la muerte violenta del vecino de Acebo, de 56 años, que apareció muerto en la madrugada del domingo en la calle Luis Chamizo de la localidad moralejana. El fallecido presentaba golpes en la cabeza, según los testimonios de vecinos recabados por este diario, que pudieron ocasionarle la muerte.

El cadáver fue hallado junto al vehículo de su propiedad en el que se había trasladado a Moraleja, localidad en la que no era infrecuente verle. El alcalde del municipio, César Herrero, manifestó que tras retirar el cuerpo los servicios de limpieza habían tenido que acudir para eliminar manchas de sangre. Según vecinos de la zona, «el hombre presentaba fuertes golpes en la cabeza que podrían haber sido causados por un martillo», aunque la Guardia Civil no ha confirmado el uso de esta herramienta ni de arma alguna en este presunto crimen.

Un suceso ocurrido en una de las principales vías de la localidad más importante de Sierra de Gata que ha generado una gran conmoción tanto en Moraleja como en Acebo desde que se conociera la identidad del fallecido, horas después de que se descubriera su cadáver.

José María F.L. se dedicaba a la agricultura, además de otros trabajos temporales, estaba casado y era padre de dos hijos, según concretó Julián Puerto, el alcalde de Acebo.

Fue sobre las 5.20 horas de la madrugada del domingo cuando el Centro de Atención de Urgencias y Emergencias recibía una llamada en la que se alertaba que había una persona fallecida. Agentes de la Policía Local se ocuparon en un primer momento de un suceso sobre el que más tarde, en torno al mediodía, se decretaba el secreto de sumario después de constatarse que el cadáver, trasladado al Instituto de Medicina Legal de Cáceres para que le fuera practicada la autopsia, presentaba signos de violencia.

La Guardia Civil asumía una investigación que se prolongó durante bastantes horas más el domingo en la propia localidad moralejana. Acordonó la zona donde se halló el cuerpo sin vida del vecino de Acebo y también las calles adyacentes de la conocida como barriada de Casas Baratas, «una zona céntrica, donde se instala el mercadillo semanal y donde residen muchas familias absolutamente normales», aclaran vecinos de Moraleja.

Pero, además de acordar la zona, la Guardia Civil ordenó también el domingo la custodia de algunos portales de la calle Cardenal Cisneros, en cuya intersección con Luis Chamizo se encontró a la víctima, y procedió a continuación al registro de una de las viviendas de esta calle.

Fue después del registro que se llevó a cabo con la autorización judicial pertinente cuando se detuvo al vecino de Moraleja y se le trasladó a dependencias de la Guardia Civil. En ellas permanecerá hasta que pase a disposición judicial y preste declaración ante la titular del juzgado de primera instancia e instrucción número 1 de Coria que ha asumido la causa abierta por este presunto crimen.

Fuentes de la Guardia Civil indicaron ayer que las diligencias policiales continúan su curso, y que el detenido será puesto a disposición de la autoridad judicial en el menor tiempo posible y, en todo caso, dentro del plazo máximo de 72 horas.

Aunque no hay ninguna explicación oficial por parte de la Benemérita, vecinos tanto de Acebo como de Moraleja circunscriben lo ocurrido a un supuesto ajuste de cuentas relacionado con un presunto tráfico y consumo de drogas, que señalan por eso como posible causa del suceso. De hecho, en la localidad moralejana «no ha sorprendido que en la calle donde ha tenido lugar la detención de la Guardia Civil pudiera haber alguna vivienda en la que se vendiera droga, era algo conocido en el pueblo, aunque hasta ahora no se hubieran producido detenciones».

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