«Estamos felices, nos hemos estrenado con dos premios»

Hasta tres botellas de champán se han descorchado esta mañana en la administración 'La cereza de oro', la número 5 de Plasencia que está en el centro de Carrefour, para brindar por todo lo alto por el estreno a lo grande de sus propietarios en la Lotería de Navidad.

«Es la primera vez que damos premios en este sorteo y hemos dado dos; estamos felices, hemos repartido 260.000 euros», resumen al unísono José Nemesio Antonio y Sonia Fernández, el matrimonio que desde agosto de 2019 está al frente de 'La cereza de oro', a la que llegaron, reconocen, «porque queríamos cambiar de aires».

Con este objetivo, ambos -él abogado y ella administrativa- decidieron dejar atrás más de 15 años de vida laboral en una asesoría para pasar a regentar un negocio «al que ir contentos cada día a trabajar porque repartimos felicidad, porque aquí la gente viene con ilusión, viene alegre».

Después de año y medio en la administración de lotería aseguran que estaban satisfechos con la decisión tomada, «de hecho, los lunes nos gustan y las semanas se nos pasan volando», pero desde hoy su alegría se ha disparado y, posiblemente, también el negocio, ya al alza, del que se hicieron cargo en agosto del pasado año.

Ese tirón ha llegado esta mañana de la mano de un cuarto y un quinto premio en el sorteo de la Lotería de Navidad, la más esperada por los ciudadanos, la que cambia la suerte cada año de muchos. «A nosotros también, aunque no tengamos un décimo premiado, porque dar premios es una alegría inmensa».

La que comenzó hoy tres horas después de que levantaran su persiana en el Carrefour. «Siempre abrimos a las diez de la mañana pero hoy, por el sorteo, hemos abierto a las nueve, para seguirlo en directo desde aquí», relata Sonia Fernández.

Y apenas tres horas después, en directo, han conocido que han dado un cuarto premio. La suerte les llegó con el 75.981 y los 200.000 euros que con él se quedan en la ciudad y en las comarcas del norte extremeño. «Porque hemos vendido los décimos en ventanilla y con las restricciones que hay por la pandemia, entendemos que lo más seguro es que el premio se haya quedado en la zona«, explica José Nemesio Antonio.

En total 200.000 euros aunque podrían haber sido el doble. «Teníamos dos billetes, dos series de este número; por tanto 20 décimos, pero hemos vendido solo 10», ha detallado.

En cualquier caso, una cantidad que ha valido bailes, felicitaciones, aplausos y brindis con champán. «Porque qué bien viene este dinero en este año tan difícil y complicado para todos», comenta José Nemesio mientras su mujer y el empleado de la administración, Víctor Prieto, vuelven a brindar acompañados por familiares y amigos que se han acercado tras conocer la noticia, y siguen recibiendo felicitaciones por parte de los muchos clientes del centro comercial que se acercan hasta 'La cereza de oro' para conocer el motivo del alboroto.

Fruto del trabajo

Y casi cuando no ha acabado la celebración por un premio que salió sobre las 12 del mediodía y que esta mañana se ha cantado muchas veces en Carrefour, el bullicio se desata literalmente cuando de nuevo en directo se conoce que la misma administración ha dado otro premio. Esta vez con el penúltimo de los ocho quintos que han salido: otros 60.000 euros por diez décimos vendidos del número 43.831.

Más champán, más brindis, más bailes, más gritos, más alegría... «Es impresionante, es que de verdad que estamos muy contentos». Ni a José Nemesio ni a Sonia ni a Víctor le salen las palabras para expresar las mil emociones que sienten por un estreno a lo grande en la Lotería de Navidad.

«Pero no todo es suerte», quiere dejar claro el matrimonio. «Esto también es fruto del trabajo». Porque la pasada Navidad «no pudimos trabajar bien la lotería, porque ya estaba cuando llegamos en agosto», pero este año todo ha sido diferente. «La envían a las administraciones desde marzo y nos llegan, en nuestro caso, entre 10 y 20 series de unos 300 números», detalla Jose Nemesio. «Pero nosotros hemos estando pidiendo una o dos series de muchos números más para ampliar las posibilidades de que toque alguno».

De hecho, «hemos llegado hasta 2.000 números distintos» y, en el caso del cuarto premio, «pedí expresamente décimos que empezaran por el 75, porque me gusta ese número». No pidió, reconoce, terminaciones en 1, porque es un «número que nunca me ha gustado». Hasta esta mañana claro. «Ahora, simplemente, me encanta el número 1».