M. Á. M.
Sábado, 6 de diciembre 2014, 08:52
El alcalde convocó ayer, de manera urgente y extraordinaria, a los presidentes de las asociaciones de vecinos de la ciudad para compartir la postura de la alcaldía en el tema de la venta de la vivienda del Presidente de la Junta de Extremadura. La reunión se celebró en el salón de plenos a partir de las 18 horas, un encuentro al que no asistió la mayor parte de los representantes de las asociaciones de vecinos de Mérida. Sí ciudadanos de otros colectivos y algunos cronistas oficiales.
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Algunos de los presidentes de las asociaciones de vecinos justificaron que no iban a acudir a la reunión porque no están de acuerdo que el primer edil «se dirija a nosotros ahora que nos necesita después de estar varios años si tenernos en cuenta», señalan.
Tampoco acudió al encuentro una representación de la Federación de Asociaciones de Vecinos. Su presidente, Pablo Simón, ha expresado su disconformidad con esta actitud «tan repentina e inusual».
Explica su ausencia diciendo que durante más de tres años «el alcalde nunca se ha dirigido a este colectivo y cuando se les ha solicitado reuniones tanto al alcalde como a la mayoría de sus concejales siempre se ha recibido el silencio por respuesta», indica Simón.
Asimismo señala que quiere hacer saber al primer edil que la única postura aceptable para esta federación en relación a la vivienda del presidente es que esta siga siendo propiedad de los extremeños y residencia oficial del Presidente de la Junta de Extremadura.
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