El Ayuntamiento empezará mañana a limpiar la basura del Guadianilla

El portavoz municipal, Julio César Fuster, explicó que pidieron hace tiempo a la Confederación intervenir en el azud para vaciar el tramo y retirar toda la basura.

La Confederación ya informó el martes que abría el salto del Puente de Hierro para reducir el volumen del cauce. Supervisará la intervención, pero aclara Julio César Fuster que será la delegación municipal de parques y jardines, con el apoyo de la Policía Local y del parque de obras, los que se encarguen de retirar todos los vertidos que han arrojado los vecinos al río.

Los operarios que trabajan en la Isla han detectado que se ha ido acumulando basura en algunos puntos del Guadianilla. Principalmente a la altura del molino de Pancaliente, por donde menos corre el río y se estancan los materiales sólidos.

Según explica el concejal Fuster, la intervención es necesaria para mejorar la estética del parque, conservar el ecosistema acuático y evitar obstrucciones en el curso fluvial por los sedimentos que arrastre la corriente cuando sube con las lluvias.

«Es una intervención necesaria y urgente que contribuirá al bienestar ambiental y a la mejora del espacio público en Mérida», señala Fuster.

Los operarios retirarán los restos a mano entre el fango. Siempre que se vacía el canal suelen encontrarse los operarios muchos plásticos, neumáticos y restos metálicos que arrojan al agua desde la Isla o que ha arrastrado el río y se ha paran según se estrecha el río.

Confederación informa también que los vecinos de Mérida verán el tramo urbano y el brazo casi seco en los próximos diez días por la maniobra en el azud. La barrera de regulación se encuentra junto al Puente de Hierro y frena la corriente antes de entrar ya en el tramo que enfila el caudal hasta la presa de Montijo. Se sube o se baja y mantiene la cota de nivel que necesita Confederación según las necesidades entre los tres puentes urbanos de la ciudad: Fernández Casado, Romano y Lusitania. Entre las barreras que cruza el río se activan unas compuertas que se abren y se cierran hasta regular la altura precisa.

Con esta maniobra se puede frenar si es necesario antes de llegar a Montijo por si en la presa tienen que hacer trabajos de mantenimiento el sus compuertas. Son habituales estos movimientos en la ciudad porque desde Montijo se distribuye el nivel para los agricultores y regantes de Mérida y Montijo. Afectará también a la zona por la que acuden los pescadores a través de la orilla del polígono industrial. El río seco por la zona de El Prado permite ver algunas construcciones sumergidas, como los antiguos molinos harineros que funcionaron hace siglos entre Mérida y Montijo.