Reserva de agua agolpada en la presa romana de Cornalvo tras las lluvias de esta semana. HOY

Las lluvias llenan los humedales de Cornalvo a las puertas de la primavera

Los arroyos que llevan al Rugidero, las Muelas o la presa romana nutren las bolsas de agua en la dehesa del parque natural

Antonio Gilgado

Mérida

Lunes, 10 de marzo 2025, 07:26

La sucesión de borrascas de las últimas semanas ha ido llenando las charcas y las lagunas del parque natural de Cornalvo. Los arroyos que ... nutren itinerarios de la ruta del Rugidero, las Muelas o la presa romana van rebosantes y la acumulación de agua se agolpa en los humedales principales del parque. Y lo hace además a las puertas de la primavera, la temporada alta en Cornalvo. En marzo llegan más paseantes, senderistas, ciclistas y esparragueros.

Publicidad

Con la sucesión de frentes, los arroyos agrandan las láminas de agua. Entre los humedales del Rugidero y Las Muelas discurren veinte kilómetros de caminos entre la dehesa.

Los visitantes se acercan también hasta el observatorio ornitológico, justo el que se encuentra al final del camino para los coches. Camino accesible, con buen piso y sin desnivel.

En primavera se multiplican las visitas en grupo de paseantes, senderistas, ciclistas o esparragueros

El problema del Parque sigue siendo la carretera estrecha de acceso desde la autovía para adentrarse, pero en el interior los caminos están señalizados y asfaltados para moverse a poca velocidad en coche.

Por Las Muelas paran a diario las aves que anidan en el parque. Colonias de garzas sobre todo.

Recomendable también para este inicio de primavera lluvioso es el pequeño desfiladero del Rugidero. Es uno de los enclaves más famosos. Se llega a través de un camino fácil que salva el arroyo.

Publicidad

Se le conoce con este nombre por el ruido que hace el agua al precipitarse por las rocas de granito cuando gana caudal. Hay que bajar para verlo. El trayecto tiene cuerdas para agarrarse en los riscos más estrechos.

La caída de la corriente se escucha muy pocas veces en el enclave, solo cuando llueve mucho y el arroyo se ensancha por encima de las piedras. Desde allí, tras el desfiladero, se puede llegar caminando hasta el principal embolsamiento de Cornalvo, la presa romana.

Publicidad

Ha ganado volumen en lo que llevamos de año hidrológico. En la presa Romana hacen fotos y recorren el frontal los visitantes que caminan por el perímetro completo rodeando el agua.

El parque tiene un centro de interpretación en la entrada. Allí explican los caminos que cruzan por los dos costados, la fauna y la flora según la época del año. Colegios, asociaciones de senderistas, grupos de jóvenes y hogares de mayores suelen pasar a diario por allí.

Cornalvo tiene una estacionalidad muy marcada. Se llena en otoño de visitantes durante los fines de semana para ver los arroyos tras las primeras lluvias y ahora en primavera para la floración en la dehesa.

Publicidad

Por el centro de interpretación pasan 10.000 interesados de media cada año y la estimación que hacen desde la Junta es que solo paran en la recepción la mitad de los excursionistas totales que entran, por eso la estimación oficial se sitúa en los 20.000 visitantes por año.

Se concentran en las ventanas de octubre y noviembre y de marzo a mayo. En primavera vienen también muchos grupos de ornitólogos aficionados. La amplia dehesa que hay de Trujillanos a Aljucén lleva ya treinta años como Parque Natural. La declaración tuvo lugar en 1993 y en estos treinta años ha ido ganando proyección y visitantes hasta convertirse en un referente del paisaje y de la observación de ornitológica a pie de la autovía de Mérida.

Publicidad

El itinerario habitual es llegar en coche hasta el aparcamiento de la presa y caminar desde allí los quince kilómetros hasta las Muelas –junto al observatorio de aves– para enlazar luego por los largos caminos de Sierra Bermeja. Durante el trayecto, estos días se ven bolsas de agua en los parajes y en los caminos se suceden los charcos.

Los linces se han convertido en otro reclamo. Se han visto varios ejemplares en los últimos meses. En el exterior de Cornalvo se ha multiplicado la población de conejos y han encontrado los linces una dehesa con poca presencia humana, conejos y bien conservada hasta la Sierra de Montánchez.

Noticia Patrocinada

Cornalvo es el paraje que más visitan los vecinos de la comarca en esta época y se prepara también para recibir el fin de semana a los mil participantes que harán las Millas Romanas.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Primer mes sólo 1€

Publicidad