El radar empieza a multar con sanciones que llegan hasta los 600 euros

El radar instalado en la avenida Reina Sofía entra en funcionamiento. Y también comenzará a multar a los vehículos que sobrepasen los 50 kilómetros por hora en el tramo de esta avenida que coincide con el Puente Fernández Casado.

El Ayuntamiento anuncia que el radar estará operativo tras superar todas las pruebas realizadas durante las últimas semanas y tener en orden toda la documentación pertinente para que este entre en acción.

Y para que no haya duda entre los conductores, desde el Consistorio se recuerda que en la Avenida Reina Sofía, como en el resto del casco urbano, la velocidad está limitada a 50 kilómetros por hora. El Reglamento General de Circulación establece multas que van desde los 100 a los 600 euros y la pérdida de entre dos y seis puntos del carné de conducir, según a la velocidad que viaje el vehículo. Este comenzará a multar a los que circulen a más de 50 kilómetros por hora.

De hecho, durante el periodo de prueba, este dispositivo ha captado a un vehículo que en este tramo viajaba a 139 kilómetros por hora.

Desde que el pasado mes de noviembre el Ayuntamiento anunciara que a instalar un radar en un tramo de Reina Sofía, los vecinos de Mérida se han interesado mucho por el lugar exacto en el que se pondría. Este punto es el desvío que hay hacia la zona comercial de La Heredad.

El radar es un modelo Cabina Urban con Multiradar C capaz de controlar de forma simultánea hasta seis carriles en ambos sentidos con identificación del infractor y su carril y mide velocidades entre 20 y 300 kilómetros por hora.

En palabras del concejal de Tráfico, Marco Antonio Guijarro, el nuevo dispositivo estará ubicado «en el lugar con mayores problemas de seguridad vial de la ciudad. Evitará accidentes en esta vía que soporta la mayor densidad de tráfico de Mérida». Según los datos que baraja el Ayuntamiento, esta avenida tiene una densidad de tráfico de unos 12.500 vehículos al día de lunes a viernes. De estos, unos 700 son camiones. Durante el fin de semana el tránsito baja a unos 8.000 turismos, de los que medio centenar son camiones.

El objetivo que pretende el gobierno local «no es recaudador», como ya ha insistido cada vez que ha hablado algo sobre este tema. «Es prevenir y evitar accidentes en esta vía. Estamos convencidos de que, con su puesta en marcha, disminuirán los siniestros y mejorará la seguridad del tráfico tanto para vehículos como para peatones. Además permitirá disminuir la velocidad y generar flujos de tráfico más estables para evitar las retenciones, explica Guijarro. Añade que, aprovechando la instalación de este radar, se ha revisado toda la señalización de la zona y se instalarán nuevas señales indicando la presencia del radar.

Para la mejora de la seguridad vial, el concejal delegado explica que el Ayuntamiento inicia una campaña de instalación de reductores de velocidad en distintos puntos de la ciudad y que se revisa toda la señalización vertical. En los últimos meses se ha actuado en este aspecto con la instalación de nuevos semáforos con testigos led y contadores de tiempo, así como con la iluminación de los pasos de peatones más transitados.