Vivimos en una sociedad bajo la ley del consumo. Y en contraposición está la austeridad, que viene a ser la virtud del poder disfrutar sin ... que seamos esclavos de nada; o sea, contentarse con lo que se tiene y no ansiar más. Por eso a muchos de los que hoy se tiene por ricos, en realidad son los más pobres de la tierra, ya que a medida que aumentan sus riquezas ahondan más su vicio, su ansiedad, su frustración. Austeridad es tener más o menos, pero sin turbar la paz ni el equilibrio interior. Austeridad es amor y bondad, pensar en los demás, compartir; si somos austeros habrá para todos. Y la verdadera grandeza del ser austero es su libertad interior, su desapego y generosidad, ir ligero de equipaje por la vida; ser austero, creo yo, es vivir en cada momento con lo mejor de nosotros mismos, abiertos a la alegría común. En definitiva, creo que educar a los hijos en la austeridad es educarlos para la felicidad, enseñarles a disfrutar de todo sin ser esclavos de nada.
Escoge el plan de suscripción que mejor se adapte a tí.
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.