Las otras elecciones

De momento solo se sabe que el actual, Mariano García Sardiña, renovará en el cargo si gana la candidatura de CIEM. La otra lista, ‘El Voto que nos une’, está auspiciada por la Confederación de Empresarios de la Provincia de Badajoz (Coeba). Pero estos últimos no han desvelado quién será su número uno en el caso de resultar vencedores.

La Cámara de Comercio y Coeba son entidades diferentes. La primera es una corporación de derecho público de carácter consultivo y de colaboración con las administraciones para ayudar a las empresas a crecer que data de 1886. La segunda es una patronal, una asociación privada de empresarios considerada agente social y nacida en 1982. Las dos, eso sí, manejan subvenciones.

Coeba y la Cámara no son lo mismo, pero hay personas que ocupan cargos en las dos y que reclaman para sí la verdadera voz del empresariado. Hay dos bloques, uno a favor de mantener a Peinado al frente de Coeba y otro que exige ya la convocatoria de elecciones en esa misma corporación tras cuatro años pendientes.

Dicen quienes llevan dos décadas siguiendo los movimientos patronales en Extremadura que todos los males vienen de la época de Antonio Masa. Más bien, de una sucesión sin resolver que ha desembocado en una lucha por convertirse en el heredero. Hay quien ve que Francisco Javier Peinado trata de cubrir el hueco sin ser capaz de aglutinar todas las sensibilidades que Masa callaba en su día con mano de hierro. Los detractores de Peinado le achacan el retraso en la convocatoria de elecciones en Coeba y le reclaman transparencia en las cuentas.

García Sardiña, presidente de la Cámara de Comercio y candidato a la reelección, es uno de ellos. El enfrentamiento se hizo público cuando Peinado le expulsó del comité de Coeba en el verano de 2021.

En cierta manera, este jueves se examina el tirón de Peinado y de García Sardiña. Estas elecciones internas de la Cámara de Comercio son clave. Si resulta ganador el bloque de Mariano García Sardiña, y por tanto pierda la lista aupada por Peinado, puede significar el fin del liderazgo de Coeba y del propio Peinado en el mundo empresarial de Badajoz.

La labor de cada candidatura en los últimos meses ha consistido en acercarse a asociaciones empresariales y, con ello, ganar el máximo número de apoyos. Saben que la participación será baja. Quizás por eso han distribuido 16 colegios electorales por toda la provincia. Tienen, además, una fórmula especial. Se vota por epígrafes. Cada elector solo puede decantarse por un candidato de su sector. Por ejemplo, el de hostelería no puede votar también al del comercio.

Cualquiera que tenga un pequeño negocio en la provincia puede votar el jueves. En cambio, en Coeba solo tienen derecho a depositar papeleta aquellos que están asociados. «Funciona como un club privado», señalan algunos de los críticos con Peinado. Pero es la confederación, y no la Cámara, el organismo que tiene la representación formal a la hora de firmar convenios y la interlocución con la administración.

García Sardiña y Peinado quieren ganar para sentirse con el respaldo del empresariado de la provincia. Seguramente por eso estas elecciones se están desarrollando a cara de perro.