Borrar
¡Qué bello es vivir!
Cultura y política

¡Qué bello es vivir!

Lo característico de las obras literarias/artísticas, además de emocionarnos, es su capacidad para trasladarnos a mundos y realidades diferentes a las habituales

Felipe Traseira

Miércoles, 1 de enero 2025, 23:24

El pasado 22 de diciembre asistí a la representación por el ballet de Kiev de 'El Cascanueces', de Tchaikovsky (1840-1893), en el Palacio de ... Congresos de Plasencia, casi lleno. Este ballet, basado en la adaptación que Alejandro Dumas hizo del cuento de Hoffmann 'El cascanueces y el rey de los ratones', no debe confundirse con una 'Suite para orquesta' que el compositor ruso compondría basándose, precisamente, en este ballet. Su protagonista, Clara, recibe como regalo de Navidad un cascanueces, que ella, en sus sueños, convertirá en un encantador príncipe, el príncipe Cascanueces, con el que se enfrentará al malvado rey Ratón y sus huestes y con el que explorará diversos reinos encantados. Los juguetes, se nos viene a decir, no son meros objetos, sino que cobran vida en la fantasía de los niños. Como advirtió Charles Dickens en su novela 'Tiempos difíciles', los niños no pueden crecer adecuadamente si sólo se les educa con realidades, en lo práctico y útil, desatendiendo el ideal, la fantasía. Pero los espectadores éramos, en su mayoría, adultos y tendremos, tras esta bellísima representación musical y escénica, que volver a la realidad cotidiana. Lo característico de las obras literarias/artísticas, además de emocionarnos con su belleza y estilo, es su capacidad para trasladarnos a mundos y realidades diferentes a las habituales, aunque sólo sea fugazmente. Esta es «la verdad de las mentiras», que diría el gran Vargas Llosa. No es que la fantasía no pueda habitar en el adulto, pero tiene que ceder su predominio a lo real. Con 'El Cascanueces' se despertó en mi la dimensión infantil adormecida.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

hoy ¡Qué bello es vivir!