Muros

El famoso muro se derrumba cuando sus 'socis' le abandonan pretendiendo que quien ganó las últimas elecciones generales (la «fachosfera») le ayude con sus votos a sacar adelante leyes con truco. Lógicamente, los del otro lado del muro, escamados, quitan los pasos del foso de sus defensas y mantienen su fortaleza, su ideario, a salvo, dejándole caer, pero con el peligro de convertirse en los malos. Esta polémica tan cacareada, de paso, desvía miradas de los juzgados, que imparables continúan con su trabajo. Al hilo del famoso decreto, puntualizar que los 'bono-votos', vía subvención al transporte, a la cultura, a la vivienda, a la compra de vehículos eléctricos, no deberían ser universales. Tan solo quien lo necesite merece ayuda. Ni café para todos, ni muro de playmobil que Sánchez desmonte cuando le conviene.