A través de estas líneas quiero expresar mi agradecimiento a los doctores Jordi Peralta Monterde y Adrián Lema Barcos. Su profesionalidad, entrega y calidad humana ... fueron esenciales en el tratamiento de la grave y complicada enfermedad que ha sufrido mi padre. Tras realizarle una CPRE fallida en el Hospital Universitario de Badajoz, que le acarreó como complicación una grave pancreatitis, han sido más de cuatro meses de situación límite para su salud, marcados por una larga hospitalización entre el Hospital de Llerena y el de Zafra, donde se ha sometido a varias intervenciones quirúrgicas y tratamientos médicos muy especializadas. Gracias a la pericia, el esfuerzo incansable y el compromiso de estos dos extraordinarios facultativos, mi padre está en vías de una total recuperación. Más allá de su excelencia médica, quiero resaltar la calidez, el trato humano y la cercanía con la que nos acompañaron en los momentos más difíciles. Su apoyo y empatía nos dieron la fortaleza y la esperanza que tanto necesitábamos. Es un consuelo inmenso saber que en nuestro sistema de salud contamos con profesionales de tan alto nivel, no solo en conocimientos, sino también en humanidad. Es de justicia que su labor sea reconocida y valorada públicamente.
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