Al Ayuntamiento de Cáceres le duele La Muela

Pero aun así el Ayuntamiento quiere cerrarlo y expulsarlos. Los acusa de usurpación de espacios públicos. Lo mismo que muchos caminos rurales, monumentos históricos, calles, plazas y aceras, pero al consistorio solo le duele esta 'muela'.

Un odontólogo experimentado, ante un problema dental complejo, evalúa cuidadosamente las distintas opciones antes de tomar una decisión. En el caso de La Muela, la ciudad de Cáceres se enfrenta a una situación similar: debe decidir si extrae una pieza valiosa o si busca una solución que permita preservarla y aprovechar su potencial.

Las soluciones dentales son varias: extracción, o sea, desalojo y cierre definitivo. Una rápida y contundente resolución del conflicto, pero que ocasionaría tensión y la pérdida de un espacio necesario. Endodoncia, preservar las piezas dañadas, evitando su pérdida; es decir, negociación, mediación y búsqueda de soluciones consensuadas que permitan una convivencia mutua y su sostenibilidad. Y, por último, una solución revolucionaria y avanzada parecida a la corona: establecer a una colaboración inteligente que beneficie a ambas partes. Afortunadamente el pronóstico lo permite, ya que casualmente en la misma boca hay dos 'muelas' similares. En la misma calle, justo al lado de La Muela, está el Espacio de Creación Joven, una pieza dental sana y funcional, que ofrece a los jóvenes un espacio con actividades parecidas, pero institucionales.

La coexistencia en la misma calle de dos espacios con objetivos comunes puede convertirse en una sinergia que enriquezca la vida cultural y social de Cáceres. La energía alternativa de 'La Muela' puede contribuir a enriquecer las propuestas más institucionalizadas del Espacio de Creación Joven. Los espacios alternativos son los laboratorios de la sociedad. A su vez, la estabilidad y los recursos del espacio oficial y público pueden brindar un marco de apoyo a las iniciativas alternativas, creando un ecosistema cultural vibrante y diverso que atraiga a jóvenes y no tan jóvenes de todos los gustos y sensibilidades. Trabajando juntos, ambos espacios contribuirán a crear una ciudad más dinámica, creativa y enriquecedora. La historia nos muestra cómo muchas ideas que inicialmente fueron consideradas radicales o marginales terminan siendo asimiladas por la cultura dominante.

Al igual que una buena intervención dental devuelve al paciente una sonrisa saludable, la permanencia de La Muela permitirá revitalizar un lugar urbano abandonado que ofrece espacios de encuentro, ayuda, aprendizaje, experimentación y desarrollo personal. Y todo en la misma calle. Concretamente en la calle de la Juventud (así se llama ahora el Camino del Molino del Marco donde están el ECJ y el CSOA).