El fin de la obligatoriedad de llevar mascarilla en los transportes públicos a partir de hoy constata que se ha completado una nueva etapa en el camino hacia la superación de la pandemia. Un éxito que los ciudadanos perciben ante todo como un alivio, lo ... que no significa que puedan olvidar el papel fundamental del protector, junto con la vacunación, a la hora de contener el contagio del coronavirus o las consecuencias más graves de la enfermedad. De ahí la conveniencia de seguir percibiéndolo como un aliado en aquellos ámbitos –centros sanitarios y residencias– donde continúa siendo preceptivo. Y en las situaciones en que una afección aconseje su empleo para proteger espacios comunes como los centros de trabajo. El respiro que a partir de ahora experimentarán los viajeros de metro, trenes o autobuses ha de acompañarse por tanto de la responsabilidad con que la sociedad debe afrontar una amenaza que todavía no es pasado. Pese a que España atraviesa uno de los mejores momentos epidemiológicos en cuanto a nuevos casos y hospitalizaciones, la covid-19 sigue causando fallecidos. Es necesario por ello completar la pauta de inmunización, especialmente en las personas vulnerables.

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