REDACCIÓN
Miércoles, 25 de julio 2007, 19:51
Fernando Turégano falleció el lunes en Bruselas a los 75 años de edad. Fue una de las figuras que alentó con más energía la cultura en Cáceres, desde la fundación del Cine-Club en los años setenta, donde se proyectaron películas de la vanguardia cultural, propuestas arriesgadas y en ocasiones hasta provocativas para el momento. Actualmente colaboraba con la Filmoteca de Extremadura como asesor.
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Además del cine, Turégano amaba la música y el teatro. Desde su jubilación -desempeñó la dirección del Instituto Nacional de Previsión en varias provincias españolas- una de sus aficiones era viajar para contemplar estrenos y espectáculos. Según sus allegados, su apertura mental y la ausencia de prejuicios le hacía disfrutar de manifestaciones artísticas de muy distinto calado.
Turégano, que estaba viudo y no tenía hijos, murió de forma inesperada, en pleno viaje, aunque en los últimos meses había reducido sus actividades sociales y padecía una afección de garganta. En el momento de su muerte se encontraba en Bruselas, abordando un avión que le llevaría a Budapest. Sus restos mortales serán trasladados a España desde la capital belga el próximo viernes, y su entierro está previsto para el sábado.
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