Rafael Ortiz Román ha sido condenado a 42 años de prisión por asesinar a sus dos hermanos el 2 de mayo de 2021. Tras el juicio con jurado celebrado en la Audiencia de Badajoz, ha quedado probado que acabó con la vida de Antonio y Francisco en el domicilio de Los Santos de Maimona en el que todos convivían.
Publicidad
El fratricida ha sido condenado por el doble crimen con la agravante de parentesco. La sentencia de la Sección Penal de la Audiencia Provincial de Badajoz, a la que ha tenido acceso este diario, le impone 21 años de prisión por cada uno de los dos delitos de asesinato.
La pasada semana, Rafael Ortiz Román fue declarado culpable por el jurado popular. Tras el veredicto, faltaba conocer la pena impuesta por el tribunal y los detalles de la sentencia, que descarta la eximente de enfermedad mental por «un déficit intelectivo de carácter leve que no le impide, ni anula, ni le disminuye su capacidad para querer y para entender».
Además de continuar en prisión, donde se encuentra desde el 7 de mayo de 2021, el condenado tendrá que abonar una compensación de 20.000 euros para sus dos sobrinos, hijos de uno de los dos asesinados.
El jurado confirmó que Rafael mató a sus dos hermanos con alevosía y que después ocultó sus cuerpos para no ser descubierto. También determinó que el asesino actuó de forma sorpresiva y que por ello las víctimas no tuvieron capacidad de defenderse, razón por la que se considera que actuó con alevosía.
Publicidad
Durante el juicio quedó acreditado que tras una fuerte discusión entre el Rafael y sus víctimas, éste golpeó reiteradamente en la cabeza y en el rostro con violencia a los dos hermanos. Lo hizo de manera sorpresiva, y empleando un objeto duro que provocó a uno de los fallecidos un traumatismo craneoencefálico severo que ocasionó una hemorragia intracraneal que resultó mortal. Al no conseguir acabar con la vida del otro hermano mediante los golpes, Rafael le colocó papel dentro de la boca y una bolsa de plástico en la cabeza provocándole la muerte por asfixia, según se recoge en el relato fáctico de la sentencia.
A continuación, el acusado ató los pies y las manos de uno y otro con cinta de embalaje y metió los cadáveres en el interior de una habitación de la casa. Llenó la estancia con diversos enseres y basura con el fin de ocultar los cuerpos, y obstruyó la puerta de dicha habitación colocando delante de ella una cocina y un horno de gas y en la parte de arriba dispuso un cartón, de manera que la puerta quedaba tapada casi por completo, permaneciendo los cadáveres allí ocultos hasta que fueron descubiertos el día 7 de mayo de 2021 durante la entrada y registro practicada en la vivienda.
Publicidad
El condenado se encuentra en prisión provisional comunicada y sin fianza por esta causa desde esa fecha.
Escoge el plan de suscripción que mejor se adapte a tí.
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
La palygorskita, los cimientos del vino rancio en Nava del Rey
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.