La Junta de Extremadura tramita una multa al Ayuntamiento de Alburquerque por impago de nóminas a sus empleados. El presidente regional, Guillermo Fernández Vara, ha explicado en una comparecencia en la Asamblea que la Inspección de Trabajo ha abierto un expediente que está en el proceso final de tramitación. La Consejería de Educación y Empleo no ha facilitado el importe de la sanción.
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Ante una pregunta de Unidas por Extremadura, el presidente de la Junta ha explicado que hay tres formas a través de las cuales otras administraciones podrían intervenir en la autonomía local. Una es mediante la Inspección de Trabajo, como se ha hecho con el expediente citado. Un segundo ámbito abarca los servicios de gestión municipal pero de competencia autonómica, y en ese caso «tenemos que garantizar que esos servicios públicos se prestan con la calidad que debe ser exigible». Y la tercera es por el régimen económico-financiero, una competencia que corresponde a la Administración del Estado y que «no está en nuestro ámbito de actuación».
Fernández Vara ha indicado que la autonomía local puede verse condicionada por otras Administraciones Públicas, «pero hay que respetar a los ayuntamientos». Como ha apuntado, las entidades locales tienen sus atribuciones y su representatividad, otorgada por las urnas, lo que confiere unos derechos «que hay que conciliar».
La portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha afirmado que más de 200 familias de Alburquerque «están viviendo un infierno», ya que el Consistorio adeuda «más de nueve nóminas». Pero este problema no solo afecta a los trabajadores, sino que «la quiebra del Ayuntamiento» va más allá.
A su juicio, la Junta de Extremadura debería intervenir en favor de los más vulnerables del municipio, como las personas mayores. «Un Ayuntamiento que tiene cuatro residencias de ancianos que no cuentan ni con enfermeras ni con asistentes adecuados», ha apuntado. «Los mayores no tienen ni ropa limpia que ponerse porque no pueden ni siquiera arreglar las dos lavadoras que se han estropeado».
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En su opinión, la Junta «no puede seguir mirando a otro lado». Además, ha recalcado que el próximo 8 de agosto concluye la moratoria a los desahucios y cortes de luz y agua por impago, lo que puede generar en Alburquerque «una emergencia social brutal».
A la petición de intervenir para solucionar los problemas de Alburquerque Fernández Vara ha replicado que «lo estamos haciendo y lo seguiremos haciendo», al mismo tiempo que ha pedido a Irene de Miguel que transmita estos problemas a la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, de Podemos, «que algo tendrá que decir también en todo esto».
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