Libertad provisional para la gestante del bebé que fue vendido en Don Benito

La mujer está investigada por los delitos de adopción ilegal y de falsedad documental. Además, tiene una orden de alejamiento para su hijo y deberá presentarse de manera periódica en el juzgado.

La madre ha llegado al Juzgado pasadas las 11 de la mañana visiblemente afectada y terminaba de prestar declaración en torno a una hora después. Lo ha hecho en presencia de un intérprete, ya que no habla español, negando todos los hechos y asegurando que quiere hacerse cargo del niño, que se encuentra ya con una familia de acogida. «Lo hemos solicitado porque mi representada quiere tenerlo en su compañía y criarlo como cualquier madre», asevera a espera del auto judicial Ángel Luis García Sanz, abogado de los cuatro investigados.

«Niega todos los hechos, no hay nada de lo que se pretende, es una relación de amistad; de hecho, si sale en libertad se va a quedar a vivir en casa de sus amigos», añade el letrado que en el centro hospitalario afirma que presentó documentación de otra persona porque «no tiene asistencia sanitaria, piensa que no la van a atender y se lleva la tarjeta sanitaria de su amiga».

García Sanz sostiene que no existía ningún trato cerrado en Rumanía, pese a que fuentes policiales aseguraban el martes que el marido que supuestamente iba a comprar el bebé había acordado un pago de 2.000 a la madre gestante. «La declaración del marido no tiene validez», dice sobre este testimonio que se produjo horas después del nacimiento del bebé.