Secciones
Servicios
Destacamos
Una retroexcavadora se ha llevado por delante, hace pocos días, una de los tesoros de la arquitectura religiosa extremeña con origen en época visigoda. La fachada de estilo gótico y la gran espadaña barroca de la ermita de Santa María de Brovales es lo único ... que se conserva de una edificación ubicada en un enclave que fue yacimiento romano y oratorio de los templarios en Jerez de los Caballeros. Se encontraba en estado ruinoso pero conservaba una estructura todavía que la hacía ser «una joya patrimonial», afirma el arqueólogo Víctor Gibello.
La ermita de Santa María de Brovales, por enclavarse en la pedanía jerezana del mismo nombre, es prácticamente historia. Está en una finca particular, de los herederos del Conde de La Puebla, al lado de un camino público muy transitado por senderistas, cerca de lo que se conoce como Casas Aisladas de Brovales.
«Lo que se ha hecho es una salvajada que no solo afecta a la propia ermita sino al yacimiento romano existente», remarca Gibello al conocer la destrucción de la ermita. La Junta y el Ayuntamiento de Jerez investigan lo ocurrido. También la Guardia Civil tras recibir una denuncia. En realidad, ya hay varias, según ha podido confirmar HOY. El Ayuntamiento de Jerez y Adenex han puesto las últimas.
Santa María de Brovales se alzaba sobre un notable yacimiento romano. La iglesia primitiva se erigió en época visigoda. La Orden del Temple la restituyó como centro de culto destacado. Las últimas reformas se realizaron en época barroca. Tras su abandono sirvió parcialmente como casa de campo. El ábside de la ermita se reconvirtió en vivienda, quedando incluida en la misma lo que pudo ser sacristía.
«Su propietario ha decidido demoler un monumento que formaba parte de nuestro patrimonio. Con su decisión nos ha robado un legado que no solo le pertenecía a él, el patrimonio es un bien común, es la herencia de nuestros antepasados. El daño es irreparable», subraya Gibello, quien insiste en «que nadie puede derribar un edificio histórico aunque se encuentre dentro de sus tierras». Los titulares de la finca viven en Madrid.
La alcaldesa de Jerez, Virginia Borrallo, y la edil de Patrimonio, Manuela Cordobés, se trasladaron ayer a la finca. Lo hicieron acompañadas por un técnico de Patrimonio del Ayuntamiento. Pudieron observar que la ermita ya casi no existe y cómo se amontonaban sillares de sus muros derribados a pocos metros.
Borrallo confirmó a HOY que el Consistorio llevará el caso a la Fiscalía. Mientras, la Consejería de Cultura desplazará hoy a un experto de Patrimonio.
El conjunto de Santa María de Brovales es resultado de un primer templo, al que se le fueron añadiendo diferentes construcciones. Entre ellos, espacios domésticos relacionados con la ermita y otros posteriores derivados de un uso profano tras abandonar su carácter religioso.
En el interior destacaban las bóvedas de medio punto y de cuarto de esfera. Eran también de interés los acabados pintados de sus muros y techos, decorados con motivos geométricos y representaciones figurativas, entre ellas las de personajes religiosos, que pueden fecharse entre los siglos XVII y XVIII.
.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.