El incendio de La Vera se da por estabilizado

Estabilizado. En Villanueva de la Vera respiran más tranquilos desde las 11.00 horas de este sábado tras muchas horas de angustia por el incendio que se declaró cerca de la localidad. El fuego se da por estabilizado y el puesto de mando se ha levantado, aunque varios efectivos continúan trabajando en la zona y hay algunas columnas de humo por el viento. Las altas temperaturas complica la extinción por completo de este incendio forestal que tiene un punto caliente cercano al campamento del que tuvieron que desalojar a unos niños.

Además de ese punto caliente, entre la Vera y el Jerte hay otro incendio activo que preocupa porque está en una zona complicada. Comenzó por una tormenta eléctrica y a última hora de este sábado se han retirado los medios aéreos, aunque continúan los terrestres.

En cuanto al incendio de Villanueva de la Vera, por el momento los vecinos que fueron evacuados de sus casas no pueden volver, por precaución. Este es el caso de los 70 niños que estaban de campamento en la zona. Este sábado pasarán su segunda noche durmiendo en el pabellón deportivo de Villanueva de la Vera, pero esperan poder volver mañana domingo a las instalaciones donde acampaban. El área donde estaban alojados ha sido rodeada por las llamas, pero no ha sufrido daños.

Sí han ardido algunas construcciones en la zona, pero solo una de ellas era una casa. El resto era edificio auxiliares para guardar aperos y herramientas.

El alcalde de Villanueva de la Vera, Antonio Caperote, está aliviado por la mejoría de la situación, aunque reconoce que la racha de incendios en la zona es angustiosa. «Vivo con el móvil pegado porque siempre temo que ocurra, escuchas ruido y cree que hay un fuego».

En los alrededores de Villanueva de la Vera se han quemado 250 hectáreas según el análisis del helicóptero 'halcón'. Las llamas han afectado a una zona de pinar y alcornocal salpicada de segundas residencias, lo que ha obligado a la Junta a declarar el nivel uno de peligrosidad, que es el procedente cuando la evolución de las llamas puede poner en riesgo bienes no forestales, o sea, carreteras, naves o viviendas, entre lo más usual.

El incendio se declaró ayer viernes a primera hora de la tarde y su evolución fue mala en las primeras horas. Sin embargo, durante la noche, las tareas constantes de las unidades de tierra lograron perimetrarlo casi por completo. Por la mañana se unieron de nuevo los medio aéreos y ya por la tarde se dio por controlado y se retiraron efectivos.

Para controlar este incendio han trabajado 150 personas, entre ellas cinco técnicos del plan Infoex, dos agentes del Medio Natural, cinco retenes, camiones, dos bulldozer y camiones del Sepei (Servicio de Prevención y Extinción de Incendios de la Diputación Provincial de Cáceres). A estos se han sumado los medios áereos y 35 militares de Badajoz en labores de vigilancia. Los soldados han vigilado los caminos de la zona para evitar que los vecinos regresasen a sus casas cuando el incendio aún estaba activo.

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