Oratorio del hospital de San Juan de Dios, Parlamento y sala multiusos

La primera sesión parlamentaria se produjo el 21 de mayo de 1985 y la última el 21 de junio de 2003. Era la capilla del hospital de San Juan de Dios, iniciado en el siglo XVIII y en el que estuvieron naciendo emeritenses hasta la década de 1980. La llegada de la autonomía lo reconvirtió como sede de la Asamblea. Coqueto pero estrecho, el viejo hemiciclo fue una caja de cerillas en la que tuvieron que desenvolverse, como pudieron, los 65 diputados de la región, bedeles y otro personal de la Asamblea.

Con el nuevo hemiciclo, la capilla quedó en desuso y ayer, tras dos años de obras, volvió a abrirse con una nueva función. Se llama la Sala de la Autonomía y, básicamente, servirá como espacio habilitado para recepciones institucionales del Parlamento regional y para exposiciones o charlas «abiertas a todos los colectivos ciudadanos», reseña Juan Ramón Ferreira, presidente de la Asamblea.

Con un presupuesto final de casi medio millón de euros de inversión, el arquitecto Juan Antonio Ortiz Orueta ha recuperado «con elemento sobrios y respetuosos con los originales» del antiguo oratorio, donde un mosaico romano, con una Medusa excepcional, pone el inevitable toque romano que salta a la vista en cualquier rincón de la capital autonómica.

El presidente del Congreso de los Diputados inauguró la sala en un acto en el que estuvieron los principales representantes de la clase política extremeña, congresistas y senadores en Madrid (Cabañes, Solana, Murillo, Llanos...), antiguos consejeros y diputados autonómicos (Manuel Amigo, Javier Corominas, Manuel Calzado...), representantes sindicales (con Julián Carretero, de CC.OO, sin corbata, al contrario de cuando fue a ver a Florentino Pérez) y representantes de otros colectivos.