Tercera jornada sin procesiones en la calle

«¡Qué pena»!, exclamaba Montse González minutos antes de las nueve de la noche en la iglesia de San Juan. Se lamentaba porque la lluvia había impedido la salida de la procesión de la cofradía de los Ramos prevista para ayer, Martes Santo, a las ocho y media de la tarde. La joven, integrante de la hermandad del Cristo de la Salud, se acercó hasta el paso de Nuestro Padre Jesús del Perdón y depositó un ramo de flores sobre las andas. «Todos los años hacemos una entrega floral cuando la imagen pasa por Santo Domingo, pero como se ha suspendido la procesión se lo traemos aquí», explicaba. «Es una lástima que el tiempo no les haya permitido salir, igual que nos pasó el lunes a nosotros», añadía.

Además de la procesión del Perdón, también se suspendió ayer el desfile del Cristo del Amparo. El Martes Santo se quedó, por tanto, sin pasos en la calle. Con la de ayer, son ya tres las jornadas sin procesiones que acumula la Pasión cacereña. De los nueve desfiles programados entre el Sábado de Pasión y el Martes Santo, solo se han podido celebrar tres. Los seis restantes han sido suspendidos: los dos del Sábado de Pasión, los dos del Lunes Santo y los dos de ayer. Solo han podido salir las tres procesiones del Domingo de Ramos.

Una vez descartada la posibilidad de estar en la calle, la hermandad de los Ramos protagonizó un vía crucis en el interior de San Juan. La cofradía del Amparo también optó por realizar un acto dentro de su ermita consistente en la proclamación del sermón de las siete palabras, un ritual que habitualmente se lleva a cabo durante el descenso hacia San Mateo.

«Estamos con pena. Pero no tenemos otra opción», decía al comunicar la decisión Juan Andrés Dorado, mayordomo de la cofradía del Amparo. La última vez que la lluvia impidió la salida de este desfile fue en 2011. Según la Agencia Estatal de Meteorología, el riesgo de lluvia para hoy, a partir de las seis de la tarde, es del 60 por ciento. La primera de las tres procesiones programadas sale a las 20.30. Otra vez desde San Juan.