P. D. SAMINO
Miércoles, 27 de marzo 2013, 01:29
La Federación de Industria y Trabajadores agrarios de UGT ha manifestado su preocupación ante la incertidumbre que rodea ante la nueva Política Agraria Comunitaria (PAC) del tabaco, que entrará en vigor en el periodo 2014-2020. «La falta de transparencia en la búsqueda de soluciones de futuro y la disparidad de propuestas provenientes de distintas fuentes, está creando un clima de confusión y desánimo en un sector que es el principal motor económico de las comarcas del norte de Cáceres». En estas zonas, «el tabaco es un monocultivo de valor incalculable, no solo por la carencia de infraestructura industrial, sino por ser el soporte socioeconómico insustituible, y un pilar fundamental de las economías de muchos pueblos». Advierte que ningún otro cultivo «genera tal nivel de valor añadido y reparto económico, calculándose que alrededor de 20.000 familias cultivan, transforman o trabajan en empresas de servicio», en las zonas tabaqueras.
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Por ello, desde UGT piden que se mantengan las ayudas al cultivo de tabaco y lamentan que la producción es deficitaria en Europa, y que el consumo obliga a grandes importaciones de países en vías de desarrollo, «cuyas políticas socio laborales y exigencias en salubridad están lejos de las exigencias de la Unión Europea».
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