REDACCIÓN
Martes, 20 de agosto 2013, 02:12
Cuatro menores han sido detenidos por la Guardia Civil como presuntos autores de un delito de tenencia y distribución de pornografía infantil al haber reenviado a varios jóvenes de localidades del norte de la provincia de Cáceres una imagen de una menor con el torso desnudo, práctica que se conoce como
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La menor que se tomó ella misma la foto y la envió a un amigo también ha sido imputada por este mismo delito, ya que al ser menor está legalmente incapacitada para difundir imágenes propias de contenido sexual.
Fue la madre de la menor quien denunció ante la Guardia Civil que una imagen de su hija con el torso desnudo había sido difundida a través de la aplicación whatsapp de telefonía móvil. Las investigaciones confirmaron que se trataba de una fotografía tomada por la propia menor, quien de manera voluntaria la había enviado a un joven de su confianza. Sin embargo, el hecho de que posteriormente hubiera un distanciamiento entre ambos hizo que la imagen fuera reenviada a varios de sus amigos, quienes reconocieron haberla hecho extensivas a su vez a otros jóvenes.
Una vez identificados, la Guardia Civil ha procedido a la detención de cuatro de ellos «al quedar demostrado que se distribuyó, exhibió, ofreció, facilitó y difundió a través de dispositivos móviles material pornográfico donde aparece una menor de edad». Tras las diligencias practicadas han sido puestas a disposición de la Fiscalía de Menores.
El pasado mes de junio, la Guardia Civil ya alertó públicamente del aumento de casos de entre los adolescentes cacereños, el envío de fotografías de contenido sexual a través del teléfono móvil, que en algunos casos también son difundidas en las redes sociales y subrayó entre sus recomendaciones que «a través de internet se pierde el control de los materiales que se comparten con otra persona, y nunca se podrá tener la certeza de que no lo publicará».
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También recuerda la Guardia Civil que «producir, vender, distribuir, exhibir, ofrecer, poseer o facilitar por cualquier medio, material pornográfico, en cuya elaboración hayan sido utilizados menores de edad, es un delito penado por la Ley».
En concreto, el difundir imágenes de este tipo sin el consentimiento de su protagonista está penado con penas de prisión de uno a cuatro años. Si en la fotografía o el vídeo, además, aparecen menores, se puede considerar creación y distribución de pornografía infantil, y solo tenerlas simplemente en el móvil también está penado.
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