Los cien trabajadores del hospital San Juan de Dios de Almendralejo se irán al paro

El operador con el que se estaba negociando para traspasar la gestión del hospital de San Juan de Dios y la residencia de mayores de Las Mercedes de Almendralejo, tras el anuncio de la marcha de la Orden de San Juan de Dios el 31 de diciembre, ha desistido, por lo que el centenar de trabajadores será despedido.

De esta forma, se rompen las negociaciones entre esa empresa y la Junta de Extremadura.

El alcalde de Almendralejo, José María Ramírez, anunció ayer que «a día de hoy sigue el despido colectivo» iniciado por San Juan de Dios, que hasta hace unos días era sólo un trámite para que un nuevo operador se hiciera cargo de los trabajadores y siguieran prestándose los servicios.

Ramírez lamentó que «se había avanzado mucho en las negociaciones» con ese nuevo operador, que comenzaron este verano y se intensificaron desde el mes de octubre, lo que había motivado la constitución de una sociedad ex profeso y de negociaciones para el traspaso con la orden religiosa, aunque finalmente se han roto. «No voy a entrar en las causas, pero este operador ha desistido y no ha seguido con lo previsto».

Sobre la posibilidad de que se evite el cierre de ambos centros sociosanitarios, el regidor admitió que no va a tirar la toalla, ni la Junta tampoco. «No voy a mentir a nadie, nos queda muy poco tiempo», aunque avanzó que se sigue negociando para encontrar algún otro operador.

El servicio que más trabajadores tiene es el hospital de media y larga estancia, que cuenta con subvenciones del Servicio Extremeño de Salud, para el que trabajan 46 personas y que ahora tiene a 20 ingresados, que serán distribuidos por centros sociosanitarios y hospitales públicos.

En cuanto a la residencia de mayores, cuenta con 20 trabajadores y 58 usuarios, de los que 31 han sido derivados por el Servicio Extremeño de Protección y Atención a la Dependencia (Sepad). Estos ya están siendo trasladados a otras residencias públicas y concertadas, a una de las cuales el Consistorio le ha pedido prioridad para contratar a los trabajadores de San Juan de Dios cuando sean despedidos.

Las familias del resto de usuarios también los están trasladando a otros centros privados.

Ese traslado ya se había iniciado hace algunas semanas por la necesidad de hacer obras en el edificio, ya que su antigüedad hace que no se hubiera adaptado a la normativa actual en cuanto a accesibilidad.

Además de estos dos servicios, San Juan de Dios presta otros como el de ayuda a domicilio, encomendado por el Ayuntamiento, que continuará, por lo que ahora se estudia una figura jurídica para que los 22 trabajadores sigan esa labor.

También gestiona el economato social, para cuya continuidad ya trabaja el Consistorio, que espera contar con la colaboración de los mismos voluntarios.