La operación antidroga del Cerro de Reyes intervino un kilo de cocaína, armas y diez coches

La 'Operación Granero', desarrollada el pasado viernes en la barriada pacense del Cerro de Reyes, se saldó con 23 detenciones, diez vehículos intervenidos y la aprehensión de un kilo de cocaína de gran pureza, 70 gramos de heroína, 190 gramos de hachís, 1.500 gramos de marihuana y 24 kilos de tabaco. En total se llevaron a cabo 15 registros domiciliarios.

Agentes de Policía Nacional procedieron en la madrugada del pasado viernes 14 de diciembre al arresto de 6 mujeres y 17 hombres por tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, blanqueo de capitales y organización criminal. La operación contó con la participación de medios aéreos, la Unidad de Intervención Policial (UPR) de Galicia, GOES de las Jefaturas Superiores de Andalucía Occidental y Oriental, UPR y la Brigada Provincial de Policía Judicial de Extremadura. El objetivo era eliminar numerosos puntos de venta de sustancias estupefacientes en la barriada pacense, pertenecientes todos ellos a un mismo clan familiar, informa el cuerpo en nota de prensa.

Los agentes encontraron una pistola con tres cargadores y munición, pistolas y escopetas simuladas, una catana y 18.000 euros en billetes fraccionados. También fueron incautados diez vehículos, varios de alta gama, tres motocicletas y una bicicleta.

En los registros se hallaron además todo tipo de utensilios para el pesaje de droga (coladores industriales, espátulas, mascarillas, guantes de goma), productos químicos para la adulteración de la cocaína y la heroína, «con los consiguientes daños potenciales para la salud de los consumidores finales».

Todas las viviendas, tanto las empleadas como puntos de venta de drogas como los domicilios de los investigados, estaban dotadas de elementos de seguridad para impedir posibles acciones policiales.

En el mercado ilícito las dosis de sustancia estupefaciente incautada podría alcanzar un valor de venta superior a los 110.000 euros.

Los detenidos, 17 varones y 6 mujeres, de entre 22 y 63 años de edad, con antecedentes por diversos tipos delictivos, fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial, que ordenó el ingreso en prisión de trece de ellos, decretando el secreto de las actuaciones.