La nueva tarjeta para discapacitados permitirá aparcar en carga y descarga en Badajoz

Los pacenses que tienen una tarjeta azul para aparcar en las plazas reservadas a personas con discapacidad deben saber que dejará de ser válida. Tendrán que volver a solicitar este derecho y enfrentarse a mayores exigencias porque hay una nueva ordenanza municipal que regula estos permisos. Esta normativa, además, concede nuevos derechos. Sus beneficiarios podrán dejar el coche en las zonas de carga y descarga de Badajoz durante un máximo de 30 minutos.

La nueva ordenanza es una exigencia de la Ley de Accesibilidad de Extremadura. La Junta exige que todos los Consistorio concedan las tarjetas siguiendo los mismos criterios y que todas se inscriban en un registro regional.

En la elaboración de la normativa ha participado Apamex (Asociación para la Atención y la Integración Social de las Personas con Discapacidad Física de Extremadura). Su responsable, Jesús Gumiel, detalla que los ayuntamientos están obligados desde febrero de 2020 a incorporar esta ordenanza y que ya lo han hecho 208, entre ellos el de Badajoz. El pleno municipal lo aprobó en diciembre y ya se ha publicado en el Boletín Oficial de la Provincial su entrada en vigor.

En el registro regional de tarjetas ya hay 1.400 concedidas, pero aún no se han tramitado desde Badajoz. El Consistorio pacense deberá hacerlo en los próximos meses.

Una de las medidas llamativas que incluye este cambio es que los beneficiarios dejarán su coche en carga y descarga hasta 30 minutos. En realidad hay una ley estatal que ya se lo permitía, pero, según detalla Gumiel, la policía solía sancionar. Luego los afectados reclamaban y las multas se anulaban. Ahora podrán hacerlo protegidos por las normas municipales.

Gumiel también advierte que la nueva tarjeta será más difícil de conseguir. «Hay personas que tienen y que no se les concederá cuando pidan la nueva», dice Gumiel, que añade que el objetivo es acabar con los abusos como las tarjetas falsas, su utilización por personas que no son el titular, etc.

Desde ahora solo la podrán pedir personas con discapacidad acreditada. También los que sufran una incapacidad temporal, pero la concesión en estos casos será extraordinaria y solo provisional.

La solicitud exige numerosa documentación. En muchos casos será fundamental el certificado del Cadex ( Centros de Atención a la Discapacidad de Extremadura). Cuando se presente todo en el Ayuntamiento, el Consistorio remitirá la petición a la Dirección General de Transporte de la Junta, que es quien evaluará si el beneficiario es apto para tener tarjeta. Se ha centralizado la decisión para que el criterio sea el mismo en todas las localidades de la región. Según explica Jesús Gumiel, en ciertos municipios había un exceso de tarjetas con respecto a la población porque se concedían a criterio de los ayuntamientos. Luego esos vecinos podían hacer uso de la tarjeta en cualquier localidad extremeña, de hecho, son vigentes en toda Europa. Con este cambio se igualan las exigencias en toda la región.

La tarjeta no estará vinculada a un vehículo sino a una persona, será intransferible y estará vigente 5 años. Luego habrá que renovarla. Solo podrá usarse cuando el beneficiario se desplace en coche, no otras personas. En caso de uso fraudulento, el Consistorio podrá retirar el permiso. Se considera fraude la utilización de una tarjeta falsificada, el uso por quien no es su titular, llevar una tarjeta caducada o que sea una fotocopia o un duplicado.

La normativa establece una serie de sanciones desde 50 a 1.000 euros dependiendo de la gravedad de la infracción. Puede subir a 1.500 si es reincidente.

Otro cambio que llegará con la nueva normativa es que Badajoz contará con más plazas reservadas. El Ayuntamiento tiene un año de plazo para analizar la oferta que hay en la actualidad y aumentarla para cumplir su propia ordenanza. Esta establece que en los alrededores de los principales centros de actividad (zonas con empresas y servicios como Correos o Tráfico) habrá una plaza por cada 40.

Así mismo, habrá una plaza por cada 20 en las inmediaciones de los centros sanitarios, asistenciales y de atención a la discapacidad, independientemente de las plazas destinadas a residencia o lugares de trabajo.

Por último, en todas las vías públicas, al menos un 2% de las plazas estarán reservadas. También en los aparcamientos.

Jesús Gumiel matiza que hace falta un estudio para conocer la situación actual en la ciudad, pero que «será difícil que se cumpla» lo que obligará al Consistorio a reservar más espacios antes de marzo de 2022.