El viejo Vivero de Badajoz, sin campo de césped por un defecto en el suelo

Badajoz tiene un campo de césped menos estos días. El viejo Vivero ha tenido que cerrar esta instalación al encontrar un defecto en el suelo. El Ayuntamiento estaba llevando a cabo una reforma en la zona y tuvo que parar la obra debido a este problema. No hay fecha para la reparación por el momento.

A principios de verano el Consistorio pacense comenzó una obra en el viejo Vivero para sustituir el césped artificial del campo de fútbol 11, la principal dotación de estas pistas deportivas. La obra ha quedado paralizada cuando los obreros localizaron deficiencias importantes en la subbase, la capa inferior de este suelo.

Ante estos desperfectos, el Consistorio pacense ha decidido paralizar la obra. Según los responsables municipales, los técnicos están analizando los desperfectos de la subbase y calculando cuál sería el coste de reparar esta capa para poder, posteriormente, sustituir el césped.

El equipo más afectado por este problema es el Santa Teresa. Uno de los objetivos de cambiar el césped era beneficiar a este club que entrena y juega en estas instalaciones. Desde 2009, cuando se instaló el césped artificial en el viejo Vivero, el terreno de juego ha tenido problemas. En la actualidad el Santa Teresa debe jugar en los campos que tiene la Federación Extremeña de Fútbol en La Granadilla y que están bautizados con el nombre de Eusebio Bejarano.

El Santa Teresa, además, está en la segunda categoría del fútbol nacional, pero aspira a ascender a la primera, la Liga Iberdrola. Para jugar en este grupo, sin embargo, el equipo debe contar con un campo de césped natural o uno artificial, pero de nueva generación, es decir, de máxima calidad.

Por esa razón el Consistorio optó por cambiar el césped del viejo Vivero que, además, era defectuoso. Las obras debían finalizar este mes, en septiembre, pero ahora no hay fecha para retomarlas. El Ayuntamiento necesita una nueva partida presupuestaria para reparar la subbase, pero aún desconoce el importe.

La situación del viejo Vivero también afecta a otros equipos de fútbol base que entrenaban y jugaban en estas instalaciones deportivas. Fueron reformadas y modernizadas en 2009 con una inversión de casi 5 millones de euros y desde entonces es muy popular. En Badajoz hay una gran demanda por los campos de césped debido a que hay muchos equipos y pocas instalaciones de este tipo. Algunos clubes cuentan con sus propios campos, pero otros se ven obligados a alquilarlos, lo que supone un coste importante.

Una obra que aliviará el problema será la construcción del nuevo campo de césped junto al Seminario de San Atón. Sobre esta obra, el Ayuntamiento asegura que la evolución es buena y que la obra terminará en la fecha prevista. El plazo es hasta diciembre. La obra comenzó en abril y cuenta con un presupuesto de 675.000 euros.

El club AP Santa Isabel, de San Fernando, ha sido el equipo que más ha insistido en la construcción de este campo por la falta de instalaciones deportivas en la margen derecha.

Otro proyecto pendiente es el futuro campo de Suerte de Saavedra. Este también contará con césped artificial de nueva generación y será, cuando se construya, la sede oficial del Santa Teresa.

El pasado mes de marzo el Ayuntamiento anunció que invertirá 1.750.000 euros de los fondos europeos Edusi en urbanizar un solar ubicado entre las traseras del colegio Manuel Pacheco y la tienda de Merkamueble. Es decir, entre las calles Antonio Hernández Gil y Juan de Ávalos.

En este terreno, de 21.960 metros cuadrados, habrá un estadio de césped en previsión de que el Santa Teresa alcance la Liga Iberdrola y además pistas deportivas destinadas a los vecinos de este barrio.

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