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efe
Domingo, 14 de diciembre 2014, 19:27
El crimen ocurrió en el residencial Gredos, en la Mejostilla, el 17 marzo de 2013, con un matrimonio como víctima, el formado por Manuel Barra, de 72 años, y Consuelo Quintana, de 69, y un hijo de ambos como acusado del parricidio, Juan Carlos Barra, de 39 años, quien será juzgado por estos hechos a partir de hoy lunes por un tribunal de jurado. Se enfrenta a una pena de 38 años de prisión.
La Fiscalía Provincial de Cáceres, en el escrito de acusación al que ha tenido acceso Efe, le imputa dos delitos de asesinato por los que pide 19 años por cada uno. También solicita el pago de una indemnización de 200.000 euros a cada uno de sus cinco hermanos por el daño moral causado.
Sus cinco hermanos se han personado también en la causa como acusación particular, y solicitan para el imputado 40 años de prisión.
La Fiscal señala que el acusado había vuelto a convivir con sus padres tras divorciarse de su mujer y carecer de trabajo e ingresos.
Además, apunta como móvil que el acusado «tenía un fuerte resentimiento hacia sus padres, a quienes culpaba de su situación de dependencia» por no querer el padre contratarle en la empresa familiar por problemas de falta de dinero en el pasado.
Así las cosas, en la madrugada del 16 al 17 de marzo de 2013 el acusado, «tras consumir alcohol y cocaína», llegó a casa de sus padres y «decidió acabar con la vida de estos».
Para ello, indica la Fiscalía, se fue al garaje a por una escopeta de caza y entró en el dormitorio del padre, que se hallaba despierto, y «le disparó en el abdomen», luego se fue al dormitorio de la madre y «le disparó en la cabeza». Al ver que el padre seguía con vida, continúa el escrito, se fue a la cocina a por un cuchillo de grandes dimensiones y «le asestó dos puñaladas en el cuello».
La Fiscalía indica que acto seguido cogió 5.600 euros que había en la casa, procedentes de la recaudación de la empresa, y huyó a la localidad de Zafra, donde fue detenido gracias a las intervenciones telefónicas. En el momento de cometer los hechos, apunta el Ministerio Fiscal, tenía ligeramente afectadas sus capacidades cognitivas y volitivas. El acusado se encuentra en prisión provisional.
Por su parte, el abogado defensor pedirá al jurado que absuelva al acusado al considerar que no es el autor de los hechos y, además, hace hincapié en su adicción a las drogas.
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