_xoptimizadax-k33D-U2111113954tJC-575x323@Hoy.jpg)
_xoptimizadax-k33D-U2111113954tJC-575x323@Hoy.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Cristina Núñez
Miércoles, 16 de noviembre 2016, 00:03
Covadonga Espeso es dueña de uno de los pisos de la Avenida Virgen de la Montaña 19 que, según sus propias palabras, «está destrozado totalmente, ha volado». La vivienda de esta mujer se encuentra en el 5ºI, encima del piso en el que se produjo la trágica explosión de gas, en el 4ºH.
Esta mujer, que se toma las cosas con filosofía, reconoce que, por otras cosas difíciles que le han ocurrido en su vida, esto lo relativiza. «Pienso que es solo algo material y me pongo en manos de mi aseguradora, no tengo prisa ni tengo nervios, solo espero que las aseguradoras se pongan de acuerdo», explica, con «confianza al 100%» en su compañía.
Covadonga no reside habitualmente en este domicilio, sino que lo hace en una casa camino de la Montaña, desde donde pudo escuchar la enorme explosión que agitó la vida cacereña la madrugada del domingo al lunes. «Fue como una bomba, vibró todo», relata. Le ha tocado ver en la prensa y en las imágenes de televisión el estado exterior de su casa, con las paredes totalmente calcinadas. Es un shock, pero, insiste, «es solo material y se arreglará».
Teléfono
A pesar de esta forma tan zen de tomarse la adversidad, Covadonga considera que el Ayuntamiento debería mejorar su atención a los afectados, y haber habilitado algún teléfono en el que se pueda recabar información acerca de los pasos a dar, porque son momentos confusos en los que cada cual va haciendo trámites por su cuenta.
En la calle, el administrador de fincas y el portero son los encargados de dar las explicaciones pertinentes a todos los que se acercan, los datos de que disponen. Los corrillos se extienden por la acera y todavía son muchos los curiosos que elevan la mirada hacia los pisos superiores del edificio Santa Ana, intentando atisbar algún resto del suceso que todavía tiene a la ciudad conmocionada.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.