La Junta admite que el parón en la Ronda Sur provocará retrasos en los plazos

En concreto, se trata de un paso elevado de la línea de ferrocarril en el que ADIF tiene que dar su autorización para actuar en este tramo y «parece ser que ADIF todavía no ha dado su autorización a que la empresa, la UTE que está llevando la obra, pueda intervenir ahí». Además, también hay una propiedad privada, situada precisamente en el otro margen de la carretera, que fue ya objeto de expropiación a su propietario, pero en la que «hay enseres y animales que no han sido tampoco desalojados», ha explicado Martín Castizo.

«Estamos a la espera de que puedan reubicarse esos enseres y esos animales para que también la empresa pueda proceder al derribo y a continuar con las obras», ha apuntado el consejero, que ha confirmado que el desalojo de los enseres puede estar listo «en un par de semanas», pero con el problema de ADIF «tengo más dudas», ha contestado, aunque espera que también se solucione «pronto».

Estos dos inconvenientes no suponen un sobrecoste de la obra. «Lo que sí puede suponer es un alargamiento en el tiempo, porque teníamos previsto finalizar para finales de este año porque se iniciaron en julio del año pasado, y eran 18 meses el contrato, pues puede que no termine en diciembre de 2025, sino que termine unos meses más tarde», ha roconocido Martín Castizo en declaraciones recogidas por Europa Press.