El colegio público de educación especial Proa afronta el enorme reto de ponerse en pie después de la oleada de robos y destrozos que se han producido durante el mes de agosto en este recinto educativo situado en Aldea Moret. El Ayuntamiento de Cáceres ... ha ordenado a la Policía Local que intensifique la vigilancia en el entorno de este colegio, del que se han sustraído ordenadores, máquinas de café, utensilios de cocina, ventiladores y otros enseres que se utilizan en el día a día de este centro en el que están matriculados 87 alumnos con discapacidad y que está atendido por 100 trabajadores entre personal docente y no docente. La Policía Nacional informa por su parte que se ha interpuesto una denuncia por robo en grado de tentativa y otro consumado y que el caso se sigue investigando.
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Desde el Ayuntamiento se indica que hay una gran preocupación por los hechos sucedidos y que el alcalde, Rafael Mateos, a pesar de no estár incorporado oficialmente a su actividad política, está pendiente de estos hechos.
La próxima semana se llevará a cabo una visita oficial para poder medir los daños que se han hecho en este centro, cuyo recinto, con 55 años de antigüedad, está plagado de deficiencias, como llevan décadas denunciando sus usuarios, desde las familias a la comunidad educativa. La directora del centro, Pilar Cañamero, expresaba el pasado jueves su preocupación por que las clases no se puedan retomar el próximo 11 de septiembre, que es cuando arranca el curso escolar en Extremadura.
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La consejería de Educación apunta por su parte que se va a trabajar junto al Ayuntamiento para que los alumnos escolarizados en este centro puedan volver a las aulas y al internado de forma normal, pese a haber coincidido estos hechos con el verano, lo que ralentiza las medidas que puedan llevarse a cabo. Una buena parte de los cargos y empleados de la administración están de vacaciones y los docentes aún no se han incorporado a sus funciones, lo harán el próximo 2 de septiembre
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Este colegio no cuenta con sistema de alarmas, aunque sí tiene un guarda de seguridad nocturno. Durante el día, no obstante, está desprotegido. «Se ha corrido la voz de que el centro se va trasladar y que había mucho que robar, el colegio ha estado abierto y han estado robando a diestro y siniestro», señalaba el jueves Cañamero. Al parecer una parte de los objetos que han sido sustraídos se han puesto a la venta.
Aunque ya estaba proyectada la construcción de un nuevo centro en el barrio de Casa Plata la paralización de la obra por parte de la empresa debido a la subida de los materiales obligó a licitarla de nuevo, lo que augura muchos años de retraso. Mientras la Junta de Extremadura ultima las obras de refuerzo estructural en el edificio, con un presupuesto de casi 47.000 euros que estaba previsto que finalizaran antes del inicio de curso.
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