Refuerzo policial en la Madrila de Cáceres para controlar accesos y el consumo de drogas y alcohol

El operativo puesto en marcha en esta zona incluye un refuerzo de la presencia policial para las noches de los jueves, viernes y sábados, además de las vísperas de festivos, y una intensificación de los controles de acceso de vehículos y de consumo de alcohol y drogas. Este operativo arranca a las once de la noche y concluye a las nueve de la mañana y cuenta con la intervención de agentes de la Policía Local y de la Nacional. Así lo ha detallado Pedro Muriel, concejal de Seguridad, al término del encuentro, celebrado en el salón de plenos del Ayuntamiento.

Muriel ha precisado que estas medidas llevan en marcha desde comienzos de octubre, cuando el alcalde, Rafael Mateos, visitó el barrio y mantuvo una reunión con los vecinos. Ahora, ha asegurado, se mantendrán. «Hechos puntuales no pueden emborronar el buen trabajo que se ha venido haciendo y que desde el equipo de gobierno se comprometió. Desde inicios del mes de octubre se toman mayores medidas de presencia y de control. Y se va a seguir trabajando en esa intensificación de controles», ha dicho.

Además, ha añadido, el refuerzo de la presencia policial en la calle tiene lugar principalmente a la hora de cierre de los locales, «que es cuando hay más aglomeración de personas», ha detallado. Y, por tanto, cuando se originan más molestias a los vecinos. Los controles, ha añadido, se realizan tanto en el exterior como en el interior de los locales.

Sobre el número de agentes desplegados en la zona, no se ha dado la cifra exacta pero Muriel sí ha precisado que para hacer un control hacen falta, al menos, seis agentes repartidos en tres dotaciones. «La Policía Nacional va a colaborar para que los controles sean más efectivos y eficientes», ha añadido.

La mesa de la Madrila, que volverá a reunirse en el mes de noviembre, ha contado con la participación de la Policía Local, Nacional, vecinos y hosteleros, además de la presencia de cuatro concejales. Francisco de Borja Gutiérrez, el presidente de la asociación de vecinos de la Madrila, se ha mostrado esperanzado al término del encuentro.

«Entramos a la reunión con un cierto escepticismo debido al problema histórico que tenemos en nuestro barrio. Ese escepticismo lo vamos a traducir, de momento, en una esperanza debido a que ha sido una reunión larga y fructífera. Somos conscientes de que lo que ha pasado este fin de semana ha sido un incidente puntual, pero ese incidente ha venido a reforzar nuestra demanda desde hace tanto tiempo para que los problemas del barrio se vayan solucionando. Nos consta que hay una preocupación evidente para solucionar esos problemas: el ruido, la violencia, las agresividades, el consumo de drogas, el tránsito de vehículos armando ruidos...», ha valorado De Borja.

Juan Miguel Olmeda, dueño de Velvet y otros establecimientos de ocio, subrayó el compromiso de los hosteleros. «Hace tres años que la gente no sale con vasos de plástico a la calle», ha dicho en referencia al control realizado por los locales para reducir las molestias. Ha defendido, además, el buen acondicionamiento de los establecimientos de ocio. "Vamos a trabajar entre todos para mejorar la situación", ha concluido.