Salaya: «Si la Junta autoriza el proyecto de Valdeflores presentaré mi dimisión»

El alcalde de Cáceres, Luis Salaya, ha anunciado este viernes que si la Junta de Extremadura autoriza el proyecto minero de Valdeflores, presentará su dimisión. Esta ha sido la reacción del regidor tras el voto en contra del grupo socialista en la Asamblea de Extremadura a una moción de rechazo a la mina presentada ayer por Unidas Podemos.

«Sí quiero dejar claro y anunciar que en el caso de que la Junta autorice el proyecto de Valdeflores, el PSOE dejará de tener un alcalde en Cáceres porque presentaré mi dimisión y, por ser más claro, yo no voy a continuar siendo alcalde si un gobierno socialista permite que salga adelante ese proyecto», ha recalcado Salaya ante los medios.

El regidor ha insistido en que no podría seguir siendo alcalde después de haberse comprometido «firmemente» a evitar este proyecto.

No obstante, ha remarcado que confía en el compromiso del presidente de la Junta de que se va a respetar el Plan de Urbanismo, que prohíbe la actividad extractiva en la sierra. En este sentido, cabe destacar que Vara afirmó ayer que «en ningún caso» se adoptará decisión alguna que no sea compatible con el Plan General de Cáceres.

Salaya ha incidido, además, en que el proyecto no puede salir adelante desde la legalidad, «por eso -ha añadido- lo que pedimos a la Junta de Extremadura es que garantice la normalidad del proceso y que garantice que la ciudad tiene la oportunidad de defenderse en el proceso».

«Lo que pedimos a la empresa minera es que si realmente cree que tiene un proyecto pida ya el permiso de explotación para que pueda caer en la declaración de impacto ambiental, porque es un proyecto sin sentido que no va a cumplir la legalidad y los mínimos para poder continuar», ha subrayado el regidor.

Visiblemente molesto, el primer edil cacereño ha manifestado que el rechazo a la moción debatida este jueves en el hemiciclo regional es «un episodio negativo y perjudicial para la ciudad de Cáceres». Y ha felicitado irónicamente a Unidas Podemos porque, según ha dicho, «ha dado un golpe al Partido Socialista y se lo ha dado, en este caso, sobre el lomo de la ciudad de Cáceres en una moción que debería haber salido adelante».

El primer edil ha criticado también que la moción se presentara sin haberse consensuado y ha afirmado, a su vez, que debería haberse retirado «si no tenía el consenso para salir adelante».

«Y en esto -ha agregado- la Asamblea de Extremadura, no solo Podemos, tienen mucho que aprender de la forma de hacer en el pleno municipal de Cáceres por todos los grupos políticos que solemos trabajar de otra forma, y que una moción como esa no se presentó, ni se hizo pública hasta que estaba consensuada con todos los grupos políticos».

Salaya ha admitido que la votación de ayer en la Asamblea es un «un fracaso» basado en la «falta de diálogo» de los grupos políticos y ha reconocido que favorece y ayuda a «emponzoñar» el debate de la mina, favoreciendo a los promotores del proyecto.

Sobre cómo afecta políticamente esta situación al PSOE de la ciudad, Salaya, que estaba acompañado por la Secretaria General de la agrupación local, Belén Fernández Casero, ha reconocido que genera una «desconfianza» que «no es justa» hacia el PSOE de Extremadura.

«En el PSOE de Extremadura y en el de la provincia de Cáceres, muy especialmente, hemos encontrado muchísimo apoyo para combatir este proyecto y posicionamientos muy claros», ha afirmado el regidor, al tiempo que ha subrayado que «esos posicionamientos cuando llegan a lo institucional se convierten en menos nítidos y generan mucha desconfianza en la ciudadanía que, desde luego, no es capaz de entender muchas de las explicaciones que damos».