«Tengo una vecina que cuando ha visto a la Virgen de la Montaña en el escaparate no paraba de llorar»

Rubén Mayordomo ha sorprendido a sus vecinos del barrio de Llopis Ivorra con la última decoración del escaparate de su peluquería, situada en la avenida de Cervantes. Está dedicada íntegramente a la Virgen de la Montaña, de la que se confiesa devoto. Es, además, hermano de la cofradía.

Una reproducción fotográfica en gran tamaño del retablo del Santuario preside la escena de fondo con el camarín vacío. Y en primer plano sobresale una instantánea de la patrona sobre madera. Ánforas –cedidas para la ocasión por la cofradía del Cristo del Humilladero– con flores completan esta recreación que no para de granjearle sorpresas y felicitaciones. Rubén, que se define como «un cacereño de pura cepa», está orgulloso del resultado. Sobre todo, cuenta, por la reacción de sus vecinas de mayor edad.

«Como la patrona no ha bajado este año a Cáceres, hay gente que tiene la necesidad de verla y no puede subir al Santuario. Estudié las posibilidades. Quería sorprender con el escaparate», expone. Y parece que lo ha conseguido porque su montaje no pasa inadvertido. Ni en Llopis ni en el vecino barrio del Espíritu Santo. La cofradía ha agradecido el gesto en sus redes sociales.

«He querido representar que la Virgen ha salido del camarín para estar más cerca del pueblo», comenta. «Una de las cosas más emocionantes es que ha pasado por aquí una vecina del barrio de 94 años y cuando ha visto la imagen no paraba de llorar. Tocaba el cristal y me daba las gracias por 'bajar' la Virgen a la ciudad. Ella no tiene familia y lleva muchos años sin subir al Santuario. Ver a la Virgen en el escaparate le impresionó muchísimo», detalla el peluquero. El montaje está listo desde el sábado y se puede contemplar hasta el domingo, día de la madre, fecha en la que la Virgen tendría que protagonizar la procesión de subida.

Hay que recodar que la patrona lleva dos años consecutivos sin bajar a la ciudad debido a la pandemia. Pero este año, a diferencia de 2020, sí se ha organizado un novenario reducido.

«La gente está revolucionada. No paran de hacer fotos», concluye Mayordomo, que en Navidad ganó el concurso municipal de escaparates.