Juanma García saca su duende

En un partido marcado en la previa por el ocurrente guiño al arte de Porrina y Camarón, tuvo que salir a relucir el duende de Juanma García. El sevillano apareció en el momento más delicado de su equipo para anular el 0-2 que parecía imposible de levantar. El Badajoz enmienda un entuerto que se le complicó más de lo debido en una de sus peores primeras partes. No le salía nada, pero por suerte apareció Juanma García con su estrella y clase para igualar un partido que tenía 0-2. En la segunda mejoró su juego con la entrada de José Ángel y se volcó en busca de culminar una remontada que no llegaría por poco.

Mal empezaban las cosas para el Badajoz con la lesión de Eloy Jiménez a los tres minutos. La mala suerte se está cebando con el equipo blanquinegro en este sentido. Sin Joaqui, Guzmán ni Ruano lo que le faltaba a Marrero era perder a otra de sus alternativas en los extremos. Por si fuera poco y con Fran Morante lesionado, para la jornada intersemanal del miércoles el técnico blanquinegro también pierde al central Manu Torres al ver la quinta amarilla. La juventud de Álvaro Romero y Álvaro Torralbo quedaban como soluciones para percutir por los costados y buscar al dúo sevillano. Con 10 en el campo mientras se preparaba el cambio de Eloy Jiménez -como mínimo tendrá para cuatro semanas si se queda en esguince de tobillo-, Álvaro Romero dio el primer aviso con un disparo que se estrelló en la misma cruceta tras recibir un gran pase de Sergio Martín y dejar a su marcador anclado al césped con un recorte fabuloso. El Badajoz ponía el ímpetu y las ganas, pero el San Fernando poco a poco se hacía con la situación con orden y control. Los pacenses lo intentaban con balones largos, pero no sabían por dónde romper la perfecta colocación gaditana. Lolo Guerrero se había pegado a Álex Rubio, que jugó con una protección en la cabeza por la brecha de Marbella, y no le concedía ni un metro. Y así haciendo circular la pelota con un juego directo el San Fernando sorprendía al Badajoz adelantándose en el marcador antes del cuarto de hora. Pedro Ríos recibía solo en la banda izquierda pacense, buscó la portería y la encontró golpeando su disparo en un defensa y batir a Néstor Díaz. El San Fernando pudo dejar aún más grogui al Badajoz con un lanzamiento de Carri que escupió el larguero en un rechace de una falta que pegó en la barrera.

El Badajoz lo pasaba mal y no encontraba su juego. El balón parecía quemarle y lo devolvía como en un partido de tenis. Todo sin bajarlo al 'pasto' como diría Di Stéfano. Y eso que el césped presentaba otro aspecto tras los trabajos de mejora, al menos aparentemente por el color. Los de Marrero sin alas perdían su velocidad y capacidad de sorpresa. El San Fernando tampoco daba opción al fallo. El equipo blanquinegro estaba noqueado y sólo se mantenía en pie por los impulsos de bravura de Álex Rubio y los chispazos de Juanma García. Álex Rubio cuando agarra el balón es como un bisonte en estampida, pero Lolo Guerrero supo manejar con temple la ferocidad del hispalense. Álex Rubio pudo recortar distancias pero empaló muy alto. Después la conexión sevillana provocó el primer cortocircuito en la ordenada defensa visitante. Álex Rubio tocaba para Juanma García que enfiló hacia la portería y en caída por un posible empujón remataba rozando el poste.

Y cuando más apretaba el Badajoz llegó el mazazo del San Fernando en otra jugada que pillaba descolocada a la zaga blanquinegra. Pedro Ríos volvía a aparecer sin marca para asistir sobre Carri que aparecía solo ante Néstor y fusilarle en el segundo disparo tras quitarse de encima el portero blanquinegro el primero. Los errores se pagan caro en esta categoría y más si al quite se aprovecha un ex Primera como Pedro Ríos.

Las pulsaciones se aceleraron en el Badajoz y buscó minimizar el daño antes del descanso. Primero con una falta de Sergio Martín que se marchó lamiendo el larguero y en otro remate de Álex Rubio que atrapó Toni Doblas abajo. Y entonces apareció Juanma García para alimentar las esperanzas pacenses con algo de fortuna al rebotar su disparo en la espalda de un rival y colarse por la escuadra. El Badajoz se marchaba a vestuarios con el subidón del gol y el Nuevo Vivero empezaba a creer.

En la segunda mitad, el Badajoz fue decidido a por el partido. Puso todo su corazón y coraje para buscar la igualada. Marrero apostó por la experiencia de José Ángel en lugar de un tierno Torralbo y los pacenses ganaron en presencia ofensiva y dominio del juego. El Badajoz bajó el balón al tapete y mostró sus cartas. Aunque el San Fernando pegó un nuevo susto con un córner directo que Néstor sacó de puños. Juanma y Álex Rubio volvían a encontrarse arriba en un contraataque que sacó la zaga gaditana.

Pero sería en una de las irrupciones de José Ángel cuando el Badajoz encontró su premio. El pacense era derribado dentro del área y Juanma García no falló desde los once metros ante el delirio del Nuevo Vivero.

El Badajoz de nuevo había apelado a otra remontada imposible ante un equipo que le tenía bien sujeto y contra las cuerdas. Los pacenses estaban con fe y se volcaron a por la victoria. Marrero quería más madera y sacó a Buben en busca de su última bala. Pudo llegar en una nueva ocasión de Álvaro Romero a pase de Álex Herrera y en un cabezazo de José Ángel que se marchó fuera. También el San Fernando les pudo matar en la orilla en dos córners seguidos que sacó Néstor con el tiempo cumplido.

El Badajoz rescata un punto que valora insuficiente. La vuelta de Ruano y Joaqui supone un alivio para Marrero que tratará de reconstruir su equipo para el miércoles en Granada ante las bajas.