Remontada nazarena en cinco minutos

almendralejo. El Olivenza dejó escapar una renta de 0-2 tras los tantos de Marcos Ortega y Chicote en Almendralejo ante unos locales que lograron la igualada gracias a los tantos de David Cruz y Víctor en la recta final del encuentro.

El despertar de la tarde ofreció un discurso lánguido. Ambos cuadros se miraron a los ojos con frialdad, pero con mínimos riesgos, la verdad. Mucho tocar y tocar y volaba el tiempo hasta que Aitor, a la salida de un córner, calentaba los guantes de Figa en el minuto 14. Los visitantes, por su parte, encontraron el premio en su primer acercamiento. El cuero al aire y en la trayectoria aérea con determinación y mejor puntería Ortega peinaba el 0-1. La tropa morada aunque tenía la hegemonía del cuero, no hallaba la solución en el césped. En el epílogo del primer acto, un magistral servicio desde la derecha de Carballo lo pifiaba incomprensiblemente Asensio con todo a su favor ante Ciga.

De la caseta saltó un Atlético más felino, desplegando un torrente de energías y rugidos - aunque en vano eso sí- para igualar ante un rival que guardaba su tesoro y congelaba el ritmo del duelo sin dar más de dos pases seguidos. Los visitantes defendían ante un Atlético que pese a dominar en el césped encajaba el segundo tras una falta directa de Chicote. Parecía que el partido estaba prácticamente sentenciado, pero no entregó sus armas un Atlético que acortó distancias por medio de Cruz. El gol alumbró el marcador, alma y corazones morados. Cabía la epopeya final. Y una vez más el nervio, la garra, el compromiso. iban a ser la pócima mágica de un conjunto que obtuvo su justo premio con el cabezazo antológico de Víctor en tiempo de prolongación.